PROGRAMA
Pasión según San Mateo, de Heinrich Schütz, con piezas intercaladas que son corales seleccionados de La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach, piezas de los Tenebrae Responsorios, de Tomás Luis de Victoria y obras de Carlos Gesualdo y Antonio Lotti, todas ellas vinculadas a la Pasión y mostrando su secuencia
Heinrich Schütz (1585 - 1672) |
Pasión según San Mateo |
|
Johann Sebastian Bach (1685 - 1750) |
Ich Bin’s, ich sollte büssen Erkenne mich, mein Hüter Was mein Gott will |
|
JTomás Luis de Victoria (1584 - 1611) |
Judas Mercator Pessimus Tamquam ad latronem |
|
Johann Sebastian Bach (1685 - 1750) |
Wer hat dich so geschlagen Befiehl du deine Wege O Haupt voll Blut und Wunden |
|
Carlo Gesualdo (1566 - 1613) |
O vos omnes |
|
Antonio Lotti (1667 - 1740) |
Crucifixus a8 A |
|
Carlo Gesualdo (1566 - 1613) |
Sepulto Domino |
FICHA ARTÍSTICA
Intérpretes
Barítono: Pedro Adarraga (Jesús)
Zenobia Consort:
Sopranos: Piluca Aparicio, Leticia Izquierdo, Rosa Moreno, Mara Rodríguez, Maite Seco, Mercedes Suárez (sirvienta 2), Colleen Terry (sirvienta 1), Gloria del Val
Altos: Belén Hernández (esposa de Pilatos), Margarita López, Paloma Mantilla, Sonia Marbel (Judas), Susana Seco, Elena Torrijos
Tenores: José María Carreras Menaut (testigo falso), Constancio Hernáez (testigo falso), Joaquín Huéscar, Pedro Izuzquiza (Pilatos), Juan Antonio Rodríguez (Pedro)
Bajos: Aldo Cano, Enrique Lim (Caifás), Santiago Romero, Agustín Sánchez-Vizcaíno
Director y Narrador: Rupert Damerell (Evangelista)
NOTAS AL PROGRAMA
Heinrich Schütz (1585 - 1672), nació en Turingia en Alemania. Después de estudiar derecho, fue a Venecia en 1609, donde estudió con Giovanni Gabrieli (y, en otra visita en 1633, con Claudio Monteverdi), trabajando en la Basílica de San Marcos.
En 1615 se traslada a Dresde, donde trabaja como compositor de la corte. Conservó su puesto en Dresde hasta el fin de su vida, creando lo que hoy en día es la famosa orquesta conocida como Dresden Staatskapelle (Capilla del Estado de Dresde).
El estilo compositivo de Schütz muestra influencias, por un lado, de sus maestros de Venecia y, por otro, de los compositores holandeses del siglo XVI. Casi todo lo que nos ha llegado del autor es música sacra, la mayoría escrita para la iglesia luterana de Dresde. A pesar de tener una reputación como uno de los mejores organistas de Alemania, no ha sobrevivido ninguna composición puramente instrumental.
Schütz utilizó mucho la técnica del contrapunto, donde las voces tienen una cierta autonomía y a veces chocan de forma sorprendente. También está considerado uno de los compositores con más sensibilidad sobre los acentos y significados del texto, que a menudo es articulado por figuras técnicas derivadas de las figuras verbales de los retóricos clásicos. Esto último se nota especialmente en su escritura para el Evangelista, Jesús y otros personajes.
La Pasión según San Mateo es una de las últimas obras de Schütz, compuesta en 1666. Las Pasiones fueron una gran tradición luterana y formaron parte de los oficios de Semana Santa. Por aquel entonces, en Dresde, el uso de instrumentos en los oficios estaba prohibido durante estos días y es por esta razón que la Pasión es totalmente a cappella. Durante la Semana Santa, las cuatro versiones de la Pasión son leídas o cantadas, la de San Mateo en el Domingo de Ramos.
El concierto que hoy ofrece Zenobia Consort, incorpora otras obras, intercaladas con la Pasión según San Mateo de Schütz. La práctica de incluir textos no bíblicos e intercalarlos con los propios de la Pasión se inició en Alemania, como por ejemplo en la Pasión de Thomas Strutz (1664), además con la participación del pueblo cantando corales. Y llegó a su cumbre con las Pasiones de J. S. Bach, Telemann y otros, en la primera parte del siglo XVIII, con sus arias para solistas, que comentan sobre la acción desde un punto de vista personal, mientras los corales reflejan la devoción y piedad colectiva. Estas prácticas son las semillas que llevaron después a los oratorios como, por ejemplo, El Mesías de Haendel.
Así, las piezas elegidas para el concierto de hoy y que acompañarán la Pasión de Schütz, son una selección de los corales que incluyó J. S. Bach en su Pasión según San Mateo, junto con unos responsorios de la liturgia de Semana Santa de Tomás Luis de Victoria y Carlo Gesualdo, y una obra de Antonio Lotti, que sirven como las arias, comentando y reflejando sobre la trama, de forma dramática.
PEDRO ADARRAGA
Nacido en La Coruña en 1966, comienza sus estudios musicales en el Real Conservatorio de Madrid, compaginándolos con los de Ciencias Biológicas en la Universidad Complutense, donde se licencia en la especialidad de Zoología en 1989.
Ese mismo año entra a formar parte del Coro de Cámara de la Comunidad de Madrid, con el cual actúa de manera habitual como bajo-barítono solista bajo la dirección de Miguel Groba durante dos temporadas.
En 1992 se traslada a Holanda, donde estudia con los maestros Max van Egmond, Paul Hameleers y Peter Kooy, obteniendo la Licenciatura en Canto-Música Antigua en la Universidad de las Artes de Amsterdam (Sweelinck Conservatorium, 1994).
Ha cantado, alternando los registros de barítono y de contratenor, en agrupaciones corales como la Nederlandse Bachvereniging, Amsterdam Baroque Choir o Deutsche Bach Vocalisten. También ha trabajado con los principales Coros profesionales de Madrid (RTVE, Teatro Real, Comunidad de Madrid).
Su actividad como solista abarca un amplio repertorio, desde oratorios como las Pasiones de Bach o El Mesías de Haendel, entre otros, hasta obras de autores del siglo XX como Strawinsky, Orff o Britten, bajo las órdenes de directores como Jaap Hillen, Bob van Asperen, Lucy van Dael, Leo Rijkhaarts o Ton Koopman. Aparece también como solista en dos grabaciones discográficas de Cantigas de Alfonso X bajo la dirección de Eduardo Paniagua.
En el campo de la música escénica, ha interpretado papeles en las óperas Dido and Aeneas y Dioclesian de Purcell, además de la producción escenificada de La Pasión según San Mateo de J. S. Bach. También cantó el rol protagonista en el estreno de la cantata escénica Aan Dovemansoren de Misha Mengelberg.
Ofrece asimismo recitales de lied, canción española y repertorio contemporáneo junto a acompañantes como Henk Verhoef, Pablo Escande o Sakurako Mitsuhashi. En la presente temporada ha ofrecido recitales en varias ciudades de Japón, además de participar como solista invitado en la Misa en Si menor de Bach, junto al Coro y Orquesta del Telemann Institute de Osaka.
ZENOBIA CONSORT
Zenobia Consort es un grupo vocal de cámara formado en 2011 por músicos profesionales y aficionados con una larga trayectoria coral y musical.
El grupo tiene una composición variable dependiendo de cada proyecto musical, pero manteniendo por lo general una estructura en la línea de los grupos ingleses como The Sixteen, Alamire, Polyphony, entre otros.
El estilo de Zenobia Consort se basa en la tradición inglesa, donde el sonido coral se forma con voces muy puras, muy conjuntadas, sin apenas vibrato y con un excelente trabajo en la afinación y empaste del sonido.
Zenobia Consort trabaja con contenidos temáticos en cada proyecto.
En su primer año de vida, el grupo ha preparado tres programas. El primero de ellos, con el título “Nesciens Mater”, dio lugar a los primeros dos conciertos, en enero de 2012, en la Catedral Magistral de Alcalá de Henares y en la Parroquia del Espíritu Santo y Nuestra Señora de la Araucana.
El concierto de hoy corresponde al segundo programa, con música de Semana Santa y girando sobre la Pasión según San Mateo de H. Schütz.
El otro proyecto en 2012 ha consistido en un “duelo” musical entre Tomás Luis de Victoria (1548-1611) y Giovanni Gabrieli (1557-1612), que se materializó en un concierto ofrecido en la Catedral de Ávila el pasado 7 de julio.
El grupo cuenta con una formación más reducida cuando interpreta programas que así lo requieren, los Zenobia Scholars, quienes han participado en el Festival Internacional de Música de Ávila Abvlensis, en agosto de 2012, con un importante éxito.
Entre los proyectos más inmediatos se encuentran conciertos en Auditorios, Catedrales e Iglesias españolas y en Inglaterra. El grupo está preparando el Réquiem de Duruflé para presentarlo en Semana Santa del 2013 en Madrid.
El coro cuenta con un Director con una amplísima experiencia y formado en la mejor tradición coral inglesa, su país de origen: Rupert Damerell.
RUPERT DAMERELL
Rupert Damerell comenzó su experiencia musical en el Coro de la Capilla del Castillo de Windsor a los 8 años de edad, donde empezó sus estudios de órgano con 10 años.
Su etapa escolar transcurrió en el conocido colegio de Eton, donde prosiguió su formación musical. También estudió violín en la escuela Julliard en Nueva York, instrumento que tocó en la Orquesta Joven Nacional de Gran Bretaña, su país natal. Es Licenciado en Musicología por la Universidad de Cambridge y organista por el Royal College of Organists de Londres.
Durante su etapa universitaria formó parte del famoso Coro del King’s College de Cambridge, con el que participó en numerosas grabaciones, integrándose posteriormente en el Coro de la Abadía de Westminster, Catedral de San Pablo de Londres, Catedral Americana de París y otras importantes iglesias e Instituciones.
Su gran versatilidad musical viene dada por sus estudios, que abarcan distintos instrumentos y campos y los cursó, entre otros, con los siguientes profesores:
Estudios de violín con Jean Harvey y Clarence Myerscough (Royal Academy of Music, Londres), Dorothy Delay (Julliard School, Nueva York) y Wolfgang Marschner (Friburgo, Alemania).
Estudios de piano con David Owen Norris y Jean Harvey (Royal Academy of Music, Londres) y Stephen Bishop Kovacevich
Estudios de órgano con Thomas Trotter, Stephen Cleobury, John Harper y Naji Hakim.
Estudios de canto con Ashley Stafford (Royal College of Music, Londres) Emma Kirkby, Evelyn Tubb y Michael Chance.
Estudios de dirección coral con Anthony Hopkins, Stephen Cleobury, Peter Phillips y Paul Goodwin.
Residente en Madrid desde 2002, canta a nivel profesional con diversos grupos de música antigua en Europa, entre los que destacan Huelgas Ensemble, Opera Fuoco, Teatro de la Ópera de París, Ensemble Oculum, Los Músicos de su Alteza, Proyecto Guerrero, Ars Combinatoria y Capilla Príncipe de Viana.
Director de varios coros en España, incluyendo una escolanía, trabaja en proyectos corales con conocidos maestros, algunos de ellos compañeros suyos de la etapa en el King´s College, como son Stephen Layton, Michael Noone o Erik Van Nevel.
También es director, promotor y profesor de cursos sobre música, citando entre los más recientes los celebrados en Ávila (Semana de canto vocal “Victoria 1611”, en 2011 y “Felipe II y los Tudor”, en 2012) y en Santander (Curso de Dirección Coral en la Universidad de Cantabria y XI Jornadas Internacionales de Música Coral). Coorganizador, con Maite Seco, de los Festivales de Música Vocal de Las Navas del Marqués, que en 2012 verá su tercera edición.
TEXTOS
Pasión según San Mateo, de Heinrich Schütz (1666).
La acción comienza el miércoles, con los preparativos de la Última Cena. La voz del evangelista va narrando los hechos con la participación de Jesús, Pilatos, Judas, etc. El coro canta la parte de “turba”, por lo que interpreta a veces a los discípulos, a los soldados y centuriones romanos, a los religiosos judíos, al pueblo...
Coro - Introitus - La Pasión de nuestro Señor Jesucristo, según el Santo Evangelista Mateo.
Evangelista - Cuando Jesús acabó estas palabras, dijo a sus discípulos:
Jesús - Bien sabéis que de aquí a dos días se celebrará la Pascua y que entonces el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado.
Evangelista - Entonces se reunieron en Consejo los sumos sacerdotes, los escribas y los ancianos del pueblo, en el palacio del sumo pontífice, llamado Caifás. Y resolvieron buscar el modo de prender con ardides a Jesús para matarle. Pero dijeron:
Coro - Sacerdotes y escribas - Que no sea en día de fiesta, para no provocar tumulto en el pueblo.
Evangelista - Estando Jesús en Betania, en casa de Simón, el leproso, se acercó a Él una mujer que llevaba un vaso con preciado perfume y lo derramó sobre su cabeza, cuando se hallaba sentado a la mesa. Al ver esto sus discípulos, se indignaron y dijeron:
Coro - Discípulos - ¿A qué tal despilfarro? Este perfume podría haberse vendido muy caro y el dinero dado a los pobres.
Evangelista - Advirtiendo esto Jesús, les habló así:
Jesús - ¿Por qué afligís a esta mujer? Ella ha hecho una buena obra conmigo. Porque a los pobres los tendréis siempre entre vosotros, pero no así a mí. Si ella ha derramado sobre mi cuerpo este bálsamo, lo ha hecho como para disponer de antemano mi sepultura. En verdad os digo que en cualquier lugar del mundo donde sea predicado este Evangelio, se alabará lo que ella acaba de hacer.
Evangelista - Entonces uno de los doce, llamado Judas Iscariote, fue a los sumos sacerdotes, y les dijo:
Judas - ¿Qué me daréis si os lo entrego?
Evangelista - Le ofrecieron treinta monedas de plata y desde entonces buscaba la ocasión para traicionarle.
Evangelista - Pero el día primero de los ázimos se acercaron a Jesús sus discípulos y le dijeron:
Coro – Discípulos - ¿Dónde quieres que hagamos los preparativos para la cena de Pascua?
Evangelista - Él les dijo:
Jesús - Id a la ciudad, a casa de aquél y dadle este recado: el Maestro me ha encomendado que te diga “mi hora está cerca y celebraré la Pascua en tu casa con mis discípulos”.
Evangelista - Y los discípulos hicieron como Jesús les había mandado y prepararon todo para la Pascua. Al atardecer, se sentó a la mesa con los doce. Y mientras comían, les dijo:
Jesús - En verdad os digo que uno de vosotros me traicionará.
Evangelista - Y ellos, apenados y angustiados sobremanera, empezaron uno a uno a preguntar:
Coro - Discípulos - Señor, ¿acaso seré yo?
Coral: Ich bin´s (La Pasión según San Mateo, Johann Sebastian Bach).
Soy yo. Debería expiarlo atado de pies y manos en el infierno. Mi alma debería padecer la flagelación y las ataduras que estás soportando.
Evangelista - Él les respondió diciendo:
Jesús - El que introduce conmigo su mano en el plato, ése es el traidor. En cuanto al Hijo del Hombre, sigue su camino, tal y como de Él está escrito. Pero, ¡ay de aquél por quien el Hijo del Hombre será entregado! ¡Más le valdría a esa persona no haber nacido!
Evangelista - Entonces Judas, que era el que le iba a traicionar, dijo:
Judas - ¿Soy yo, Maestro?
Evangelista - Y Él le dijo:
Jesús -Tú lo has dicho
Evangelista - Mientras comían, Jesús tomó el pan, lo bendijo, lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo:
Jesús -Tomad y comed. Este es mi cuerpo.
Evangelista - Y tomó el cáliz, lo bendijo y se lo entregó diciendo:
Jesús - Bebed todos de él, porque esta es mi sangre, la sangre del Nuevo Testamento, que será derramada por muchos para el perdón de los pecados. Yo os digo que no beberé más de este fruto de la vid, hasta que llegue el día en que de nuevo lo beba con vosotros en el Reino de mi Padre.
Evangelista - Y habiendo proclamado el himno de acción de gracias, marcharon hacia el Monte de los Olivos. Entonces les dijo Jesús:
Jesús - Esta noche, todos vosotros padeceréis escándalo por mi causa. Como está escrito: "Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño". Más, cuando resucite, os precederé en el camino hacia Galilea.
Coral: Erkenne mich (La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach).
¡Reconóceme, guardián mío, llévame contigo! De Ti, fuente de los gozos, he recibido todos los míos.
Tu voz me ha deleitado con leche y dulces manjares, tu espíritu me ha colmado con incontables goces celestiales.
Evangelista - Pero Pedro, respondiendo, le dijo:
Pedro - Aunque todos se escandalicen de Ti, yo nunca jamás me escandalizaré.
Evangelista - Jesús le respondió:
Jesús - En verdad te digo Pedro, que esta noche, antes de que cante el gallo, me habrás negado tres veces.
Evangelista - Pedro le respondió:
Pedro - Aunque tuviese que morir por tu causa, no te negaré.
Evangelista - Y lo mismo dijeron los demás discípulos.
Evangelista - Entonces marchó Jesús con ellos a un huerto, llamado de Getsemaní, y habló así a sus discípulos:
Jesús - Sentaos aquí, mientras yo voy allí a orar
Evangelista - Y llevándose consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, empezó a entristecerse y a angustiarse. Entonces Jesús les habló:
Jesús - Mi alma está triste hasta la muerte; quedaos aquí y velad conmigo.
Evangelista - Avanzó unos pasos y, postrándose con su rostro sobre el suelo, oraba diciendo:
Jesús - Padre mío, si es posible, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya.
Evangelista -Y al volver hacia donde estaban sus discípulos, los encontró dormidos y les dijo:
Jesús - ¿No habéis podido velar conmigo ni siquiera una hora? Velad y orad para no caer en la tentación. El espíritu está pronto, pero la carne es débil.
Evangelista - De nuevo se retiró a orar por segunda vez, diciendo:
Jesús - Padre mío, si no es posible que pueda pasar este cáliz sin que yo lo beba, hágase siempre tu voluntad.
Coral: Was mein Gott will (La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach).
Que se cumpla siempre la voluntad de mi Señor, pues su voluntad es lo mejor;
Siempre está presto a ayudar a quienes creen firmemente en Él; Señor piadoso, ¡Tú nos salvas de la miseria!, y nos castigas con mesura. Quien en Dios confía, gozosamente se apoya en Él, pues no le abandonará
Evangelista - Y volviendo, los encontró de nuevo dormidos, pues sus ojos estaban cargados de sueño. Y dejándolos, se retiró a orar por tercera vez, repitiendo las mismas palabras. Luego volvió con sus discípulos y les dijo:
Jesús - ¿Queréis todavía dormir y reposar? Mirad: Es llegada la hora en que el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los pecadores. ¡Levantaos, vámonos! Mirad, ya se acerca aquél que me traiciona.
Evangelista - Y mientras estaba pronunciando estas palabras, llegó Judas, uno de los doce, y con él un gran gentío armado de espadas y palos, enviado por los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo. El traidor les había dado esta señal: "Aquél a quien yo besare, ése es; prendedle". Y al instante se acercó a Jesús y dijo:
Judas - ¡Dios te guarde, Maestro!
Evangelista - Y le besó. Jesús le dijo:
Jesús - Querido amigo, ¿a qué has venido?
Coro: Judas Mercator (Tenebrae Responsorios, de Tomás Luis de Victoria).
Judas, en un pésimo negocio, entregó al Señor con un beso, y él, como un cordero inocente, no se negó al beso de Judas. Por un puñado de monedas, entregó a Cristo a los judíos.
Hubiera sido mejor para él no haber nacido.
Evangelista - Entonces se adelantaron los demás, pusieron las manos sobre Jesús y le prendieron. Y he aquí que uno de los que estaban con Jesús desenvainó su espada e hirió a uno de los criados del sumo sacerdote, cortándole una oreja. Entonces le dijo Jesús:
Jesús - Envaina tu espada, pues quien a espada mata, a espada morirá. ¿No sabes que, si se lo pido, mi Padre puede enviarme más de doce legiones de ángeles? Más, ¿cómo se cumplirían entonces las Escrituras que dicen que tiene que suceder así?
Evangelista - Entonces en aquella hora habló Jesús a las turbas:
Jesús - Habéis venido a prenderme como a un asesino, con espadas y palos; a diario me he sentado con vosotros en el templo, enseñándoos, y no me prendisteis. En verdad, que todo esto ha sucedido para que se cumplan las Escrituras de los profetas.
Coro: Tamquam ad latronem (Tenebrae Responsorios, de Tomás Luis de Victoria).
Como contra un ladrón habéis salido con espadas y palos para prenderme.
Día tras día yo estaba con vosotros enseñando en el templo y no me prendisteis. Pero ahora, tras ser flagelado, me llevan a la muerte en la cruz.
Y cuando habían puesto las manos sobre Jesús y lo habían detenido, él les dijo:
Evangelista - Entonces todos los discípulos huyeron, abandonándole. Los que prendieron a Jesús le condujeron ante el sumo pontífice Caifás, con quien se habían reunido los escribas y los ancianos. Pero Pedro le había seguido de lejos hasta el palacio del sumo pontífice, y entrando en él, se sentó entre los criados, para ver en qué paraba aquello. Los sumos sacerdotes, los ancianos y todo el concilio buscaban falsos testimonios contra Jesús, para condenarle a muerte, pero no los encontraban.
Evangelista - A pesar de haberlo intentado con numerosos testigos falsos, no encontraban ninguno. Finalmente llegaron dos nuevos testigos falsos que dijeron:
Falsos testigos - Este dijo: "yo puedo destruir el Templo de Dios y reconstruirlo en tres días".
Evangelista - Entonces, poniéndose en pie el sumo pontífice, le dijo:
Caifás - ¿Nada respondes a lo que éstos testifican contra ti?
Evangelista - Pero Jesús permanecía en silencio.
Evangelista - El sumo pontífice le respondió diciendo:
Caifás -Yo te conjuro de parte del Dios vivo, para que nos digas si Tú eres Cristo, el Hijo de Dios:
Evangelista - Jesús le dijo:
Jesús - Tú lo has dicho. Y aún os advierto: desde ahora habréis de ver al Hijo del Hombre, sentado a la diestra del Poder, y viniendo sobre las nubes del cielo.
Evangelista - Entonces el sumo pontífice se rasgó las vestiduras, diciendo:
Caifás - Ha blasfemado. ¿Qué necesidad tenemos ya de testigos? Vosotros mismos acabáis de oír la blasfemia. ¿Qué os parece?
Evangelista - A lo que ellos respondieron:
Coro - Sumos sacerdotes - ¿Es reo de muerte!
Evangelista - Entonces empezaron a escupirle en el rostro y a golpearle con el puño. Y otros, después de vendarle los ojos, le abofeteaban diciendo:
Coro – Soldados - Profetízanos, Cristo, ¿quién es el que te ha golpeado?
Coral: Wer hat dich so geschlagen (La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach).
¿Quién te golpea así, mi Salvador, y quién te ultraja con las más crueles afrentas? Tú no eres un pecador como nosotros y nuestros hijos, la maldad te es ajena.
Evangelista - Pedro estaba sentado fuera en el atrio, y acercándosele una sirvienta, le dijo:
Primera Sirvienta - Tú estabas también con Jesús de Galilea.
Evangelista - Pero él lo negó delante de todos diciendo:
Pedro - No sé lo que dices.
Evangelista - Pero cuando él había salido a la puerta, le vio otra, que dijo a los presentes:
Segunda Sirvienta - Este estaba también con Jesús de Nazaret.
Evangelista - Y de nuevo lo negó, y jurando dijo:
Pedro - No conozco a ese hombre.
Evangelista -Y poco después se dirigieron a Pedro los que estaban alrededor, diciéndole:
Coro - Pueblo - Verdaderamente, tú eres uno de los suyos, pues tu forma de hablar te delata.
Evangelista - Entonces se puso a maldecir y a jurar:
Pedro - ¡No conozco a ese hombre!
Evangelista - Y al instante cantó el gallo. Entonces se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: "Pedro, antes de que cante el gallo, me negarás tres veces". Y, saliendo afuera, lloró amargamente.
Evangelista - Por la mañana, todos los príncipes de los sacerdotes y los ancianos del pueblo celebraron un consejo para condenar a muerte a Jesús. Después de haberle atado, le llevaron a presencia del gobernador Poncio Pilato. Viendo entonces Judas, el que le había traicionado, que iba a ser condenado a muerte, se arrepintió y devolvió las treinta monedas de plata a los sumos sacerdotes y a los ancianos, diciéndoles:
Judas - He pecado entregándoos con traición sangre inocente.
Evangelista - Ellos le replicaron:
Coro - Sacerdotes y escribas - Y a nosotros, ¿qué nos importa? ¡Allá tú!
Evangelista - Entonces él arrojó las monedas de plata en el templo, se retiró y, alejándose, se ahorcó. Los sumos sacerdotes tomaron las monedas de plata y dijeron:
Coro – Sacerdotes - No es lícito guardarlas en el tesoro sagrado, puesto que son precio de sangre.
Evangelista - Y después de haberlo discutido en un consejo, compraron con las monedas el campo de un alfarero para enterrar en él a los forasteros. De ahí que su nombre sea, hasta el día de hoy, Campo de la Sangre. De este modo se cumplió lo dicho por el profeta Jeremías: "Y tomaron treinta monedas de plata, precio puesto a Aquél por los hijos de Israel; y las gastaron en el campo de un alfarero, conforme el Señor lo había ordenado". Después Jesús compareció ante el gobernador, quien, interrogándole, le dijo:
Pilatos - ¿Eres Tú el Rey de los judíos?
Evangelista - Entonces Jesús le dijo:
Jesús - Tú lo has dicho.
Evangelista - Y a las acusaciones que le hacían los sumos sacerdotes y los ancianos, nada respondía. Entonces le dijo Pilatos:
Pilatos - ¿No oyes cuán duramente te acusan?
Evangelista - Más Él no decía ni una sola palabra, hasta el punto de que el gobernador quedó profundamente maravillado.
Coral: Befiehl du deine Wege (La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach).
Dirige tu camino y todos los sufrimientos de tu corazón hacia el más fiel de los guardianes, a Aquél que reina en los cielos, que gobierna las nubes, el aire y los vientos. Siempre será tu mejor guía.
Evangelista - Durante la fiesta era costumbre que el gobernador, para agradar al pueblo, concediese la libertad de un reo, a su elección. Por aquel entonces había un preso muy conocido, de nombre Barrabás. Así pues, cuando todos estaban reunidos, Pilatos les dijo:
Pilatos - ¿A quién queréis que libere, a Barrabás o a Jesús, el que se hace llamar Cristo?
Evangelista - Él sabía con certeza que se lo habían entregado por envidia. Cuando se hallaba sentado en el tribunal, su mujer mandó recado para que le dijeran:
Mujer de Pilatos - No haya nada entre ti y ese hombre justo, pues hoy he padecido mucho en sueños por causa de Él.
Evangelista - Pero los sumos sacerdotes y los ancianos exhortaban al pueblo para que reclamasen la libertad de Barrabás y para que condenasen a morir a Jesús. Y tomando la palabra el gobernador, les dijo:
Pilatos - ¿A cuál de estos dos queréis que os suelte?
Evangelista - Ellos dijeron:
Coro - Pueblo - ¡A Barrabás!
Evangelista - Pilatos les dijo:
Pilatos - ¿Qué debo hacer, entonces, con Jesús, el que se hace llamar Cristo?
vangelista - Todos dijeron:
Coro - Pueblo - ¡Crucifícalo!
Evangelista - El gobernador replicó:
Pilatos - Pero, ¿qué mal ha hecho?
Evangelista - Pero ellos, elevando la voz, gritaban:
Coro - Pueblo - ¡Crucifícale!
Evangelista - Viendo Pilatos que nada lograba, sino que, al contrario, el tumulto arreciaba, tomó agua y, lavándose las manos a la vista de todo el pueblo, les dijo:
Pilatos - Soy inocente de la sangre de este justo. Allá vosotros.
Evangelista - A lo que todo el pueblo contestó:
Coro - Pueblo -¡Que su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos!
Evangelista - Entonces, liberó a Barrabás, hizo azotar a Jesús y se lo entregó para que le crucificasen. Entonces, los soldados del gobernador tomaron a Jesús y le condujeron al pretorio, reuniendo a su alrededor a toda la cohorte. Después le desnudaron, le cubrieron con un manto púrpura, entretejieron una corona de espinas y la pusieron sobre su cabeza, así como una caña en su mano derecha e, hincando la rodilla ante Él, se mofaban, diciéndole:
Coro - Soldados - ¡Salve, Rey de los judíos!
Evangelista - Y mientras le escupían, le golpeaban con la caña en la cabeza.
Coral: O Haupt voll Blut und Wunden (La Pasión según San Mateo, de Johann Sebastian Bach).
¡Oh, cabeza lacerada y herida, llena de dolor y escarnio! ¡Oh, cabeza rodeada, para burla, de una corona de espinas! ¡Oh, cabeza otrora adornada con elevados honores y agasajos y ahora grandemente ultrajada!:
¡Yo te saludo!
Evangelista - Y después de haberle humillado y escarnecido, le quitaron el manto, devolviéndole sus vestiduras y le llevaron a crucificar. Y cuando estaban en camino, encontraron a un hombre de Cirene, de nombre Simón, a quien obligaron a cargar con la cruz. Y una vez llegaron al lugar llamado Gólgota, que significa "lugar de la calavera", le dieron a beber vino mezclado con hiel; pero cuando lo probó, no quiso beberlo. Y una vez que le hubieron crucificado, se repartieron sus vestiduras, jugándoselas. De este modo se cumplió lo dicho por el profeta: "se repartieron mis vestiduras entre ellos y echaron a suertes mi túnica". Y sentados al pie de la cruz, montaron la guardia. Luego escribieron sobre su cabeza el motivo de la condena: "Éste es Jesús, el Rey de los Judíos".
Coro: O Vos omnes (Tenebrae responsorios, de Carlo Gesualdo).
O vosotros, vosotros hombres que transitáis por el camino, mirad y ved si hay dolor como mi dolor.
Mirad todos y ved mi dolor.
Evangelista - Al mismo tiempo fueron crucificados dos bandidos, uno a su derecha y otro a su izquierda. Todos los que pasaban por allí le injuriaban y blasfemaban sacudiendo la cabeza, diciendo:
Coro - Pueblo - Tú, que destruías el templo de Dios y lo reconstruías en tres días, ¡ayúdate a Ti mismo! Si eres el Hijo de Dios, ¡baja de la cruz!
Evangelista - Y de este modo los sumos sacerdotes, junto con los escribas y los ancianos, se burlaban de Él diciendo:
Coro - Sacerdotes, escribas y pueblo - ¡A otros ha salvado y no puede salvarse a sí mismo! Si es el Rey de los Judíos, que descienda ahora de la cruz, y entonces creeremos en Él. Puesto que ha confiado en Dios; que Él le libere ahora. Por algo dijo: "Yo soy el Hijo de Dios".
Evangelista - Incluso los mismos bandidos que habían sido crucificados junto a Él le insultaban. Y desde la hora sexta hasta la hora nona, grandes tinieblas se extendieron sobre toda la tierra. Y alrededor de la hora nona, Jesús dio un fuerte grito:
Jesús - ¡Eli, Eli, lamma asabathani!
Evangelista - Que significa: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?" Y algunos de los que allí estaban, al oír estas palabras, dijeron:
Coro - Pueblo - Está llamando a Elías.
Evangelista - Y al momento, uno de ellos, tomó una esponja, y después de empaparla en vinagre, la colocó en la punta de una caña dándosela a beber. Los otros decían:
Coro - Pueblo - Dejadle, veamos si Elías viene a salvarle.
Evangelista - Pero Jesús, dando de nuevo un fuerte grito, exhaló su espíritu.
Coro: Crucifixus, de Antonio Lotti
Fue crucificado también por nosotros bajo Poncio Pilato. Él padeció y fue sepultado.
Evangelista -Y he aquí que el velo del Templo se rasgó en dos, de arriba a abajo. Y la tierra tembló y se agrietaron las rocas y se abrieron los sepulcros y se alzaron muchos cuerpos de santos que allí dormían, salieron de las tumbas tras su resurrección, fueron a la ciudad santa y fueron vistos por muchos. El centurión y todos los que estaban con él guardando a Jesús, al ver el terremoto y cuanto había sucedido, sobrecogidos por el temor, exclamaron:
Coro - Centurión y guardianes - Verdaderamente, Éste era el Hijo de Dios.
Evangelista - Estaban también allí, algo apartadas, muchas mujeres, que habían seguido a Jesús desde Galilea para asistirle, entre ellas, María Magdalena y María, la madre de Santiago y José, y la madre de los hijos de Zebedeo. Al atardecer, llegó un hombre rico de Arimatea, llamado José, que era asimismo uno de los discípulos de Jesús. Se presentó ante Pilatos y le pidió el cuerpo de Jesús. Pilatos ordenó que le fuese entregado.
Coro: Sepulto Domino (Tenebrae responsorios, de Carlo Gesualdo)
Una vez sepultado el Señor, se selló la tumba con una roca. Y pusieron soldados para custodiarlo, pues los jefes de los sacerdotes fueron a Pilatos y así se lo pidieron.
Evangelista – José tomó el cuerpo y lo envolvió en un lienzo limpio y tras depositarlo en una tumba nueva que había hecho excavar en una roca para sí mismo, cerró la entrada con una gran piedra y se fue. Estaban allí, sentadas ante el sepulcro María Magdalena y la otra María. Al día siguiente, los sumos sacerdotes y los fariseos fueron a Pilatos y le dijeron:
Coro - Sacerdotes y escribas - Señor, hemos recordado que este impostor dijo, cuando aún vivía: "después de tres días resucitaré". Ordena, pues, que se vigile el sepulcro hasta el tercer día, no sea que vengan sus discípulos, roben el cuerpo y digan al pueblo: "ha resucitado de entre los muertos" y fuera este postrer engaño aún peor que el primero.
Evangelista - Pilatos les dijo:
Pilatos - Ahí tenéis la guardia, id y custodiadlo como os parezca.
Evangelista - Ellos fueron, aseguraron el sepulcro con la guardia y sellaron la sepultura.
Coro Final - Cristo, a Ti sea la gloria, por tu dolor amargo, en la cruz de sufrimiento has muerto por nosotros. Ahora, con Dios Padre, reinas para siempre. Ayuda a estos pecadores miserables, concédenos la salvación. Señor, ten piedad, Cristo, ten piedad, Señor, ten piedad.