Cádiz, tú ya me entiendes
| Raquel la Mónica, Nina Alemania y María la Mónica, voces intérpretes |
| Adriano Lozano, guitarra flamenca |
| Tomi Alemania, teclado, mandolina y percusión |
| Adrián Trujillo, palmas y percusión |
| Colin Preston, sonido |
| María Ávila, producción |
Lo de Las Mónicas empezó en un patio en Chiclana y en Navidad. Zambombá viene y zambobá va, pasaron muchos años. Aunque el big bang de Las Mónicas viene de lejos. De una bisabuela que hacía manteca colorá y butifarras, que aliviaban el hambre de los que tenía alrededor. Como hace una gigante roja con los planetitas que están cerca. Una matriarca que marcó de raíz a todas las ramas que le fueron saliendo a este arbolito que se divide en La Banda y el Lugar, y que nació en un patio repleto de mujeres con arte, garra y poca vergüenza. Si los villancicos de negros de Cádiz se cantaban todo el año, ellas, ¿por qué no?, decidieron seguir cantando y bailando más allá de la Navidad y dejar para el criterio de los ratones seis discos y muchos conciertos.
Tres de estas mujeres decidieron dar una pataíta hacia delante y sacar, con un título guasón, Preparándonos para la fama, un disco de flamenco sin las apreturas de los supertacañones de lo rancio, ni los cánones rígidos de los puros falsos. Un flamenco alegre y de letras renovadas que llevó a Nina, hija del gran Antonio Alemania, y a Raquel y María hasta el Corral de la Morería, en la villa y corte de Madrid. Un tablao muy estupendo. Al éxito apañaíto de la que se gana la vida con el arte. Pero nada dura tanto como para que la fama las agobiara. Las tres decidieron plantar sus semillas en sus propios huertecitos. Y tirar cada una hacia su cante en solitario.
¡Qué suerte tiene Madrid! Siete años después se presentan en la villa y corte otra vez para envidia de las que la rodean. Las tres. Juntas por el sí de las niñas con arte. El espectáculo que presentan se llama Cádiz, tú ya me entiendes, un show que aplica las magias y usanzas, los sortilegios y mecánicas, de la gran madre del flamenco y el carnaval, esa vieja sabia llamada Cádiz. Cádiz, ya tú me entiendes es una ristra de tanguillos de letras cachondas, de alegrías bien llevás, de chuflillas con rastro de sal, de cantes de vuelta y vuelta, como los filetitos en una plancha. Y encima con una actualización de letras y de sus poderosos mensajes. Sin olvidar, blam blam, el guiño fuerte al carnaval y a esa manera de cantar en las fatigas con alegría, viviendo cada momento como si fuera el último. Personajeo fuerte o personalidades acentuadas que dirían en Madrid, cantecitos enchampelaos, pataítas y repiques, jaleos dospuntocero, mensajes feministas, naturalidad, desparpajo, poca vergüenza y alegría. A disfrutar de Las Mónicas. No ni ná.
Hace ya más de 15 años que esta familia de mujeres chiclaneras decidieron llevar a los escenarios el flamenco que mamaban en el patio de su abuela. Todo arrancó en Navidad, y quedó reflejado en seis discos y numerosos conciertos, convirtiéndose en todo un clásico en el mes de diciembre. Preparándonos para la fama fue su séptimo álbum y, a la vez, el primero en el que Raquel, Nina y María hacen una apuesta más seria, llegando a actuar con gran éxito en El Corral de la Morería de Madrid. Tras numerosos conciertos de todo tipo por todo el territorio nacional, deciden hacer una parada y vivir la experiencia de trabajar como solistas y con otros proyectos socioeducativos. Han pasado siete años y el festival madrileño, Suma Flamenca, ha conseguido unir a este trío de personalidades tan diferentes, pero con el mismo denominador común: el Flamenco gaditano. Cádiz, tu ya me entiendes es el título de un nuevo espectáculo diseñado para la ocasión, donde representarán los cantes más típicos de su tierra: tanguillos, alegrías, chuflillas, soleá de Cádiz, cantes de ida y vuelta con letras más actuales, mensajes positivos y guiños al carnaval. Estos tres personajes interpretan su papel caricaturizándose a sí mismas con la naturalidad y la interacción que las caracteriza, sensibilidad y alegría o, como ellas dicen, con flamenco integrante. Ellas vienen con Adriano Lozano, Tomi Alemania y Adrián Trujillo, otros tres gaditanos que, además de acompañarlas con sus instrumentos y sus soniquetes, completan con sus personalidades este surtido de la bahía lleno de luz y salero.
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