ECONOMÍA DEMOGRAFÍA SOCIEDAD MUNICIPIOS Y TERRITORIO TABULACIONES MADRID EN CIFRAS

Cuentas del Sector de Servicios a Empresas en la Comunidad de Madrid 1996 (Base 1996). 1. Metodología


1.1. Objetivos y descripción general de la operación

La importancia del sector servicios a empresas en las economías desarrolladas es un hecho indiscutible. Resulta aún más patente cuando nos centramos en una economía como la de la Comunidad de Madrid, que como capital del Estado y por su propio peso económico, recordemos que se trata de la segunda región industrial de España, es sede de los centros decisorios más diversos, presentando unas características inmejorables para el desarrollo de este tipo de actividades.

A principios de 1992, el entonces Departamento de Estadística, publicó la primera investigación estadística sobre esta rama del terciario, tras una experiencia piloto con la subrama de Publicidad, con el objetivo primordial de medir esa importancia. Con ello se pretendía cubrir una gran laguna de información, ya que en la práctica no existían datos útiles desde un punto de vista analítico suficientes para esclarecer su peso relativo en nuestra economía (1).

Esta publicación es la cuarta de la serie, y forma parte de un conjunto de investigaciones de carácter estructural que el Instituto ha venido realizando en los últimos años, y que se enmarcan bajo el proyecto denominado Encuesta de Actividades Económicas (E.A.E.). Es este un proyecto de normalización de las diferentes operaciones estadísticas, basado en la sistematización, objetivación y mejora del diseño, recogida y tratamiento de la información.

Prácticamente no hay ningún cambio fundamental reseñable en los planteamientos de las cuatro operaciones que no se deriven de las mejoras metodológicas introducidas en el proceso, y del hecho de que en las tres últimas ocasiones la operación incluye la actividad publicitaria, actividad que originalmente se exceptuó por haber sido objeto de una investigación en el ejercicio anterior con carácter de pretest y cuyos principales resultados actualizados fueron incluidos en la publicación final.

La elección de esta rama parece de sobra justificada, por lo que baste señalar que no solo se trata del indudable peso intrínseco del sector en la economía madrileña, sino que, parte de su importancia radica en el carácter estratégico que estos servicios tienen dentro del proceso de crecimiento económico de las economías modernas por la concurrencia de dos fenómenos: por un lado la aparición de nuevas tareas en la organización empresarial, y por otro, el aumento de las posibilidades de externalización de las que tradicionalmente formaban parte de los costes internos de producción.

Más adelante se especificará detalladamente lo que a efectos de este estudio se entiende bajo la denominación de "servicios a empresas" y el porqué de la no existencia de una comprensión única y generalizada acerca de su contenido, pero si es el momento de precisar que el conjunto de actividades que engloba esta investigación, tanto en cuanto se refiere a los establecimientos que tienen como actividad única o principal la denominada "prestación de servicios a empresas", no refleja mas que una parte, no siempre mayoritaria, de las labores de este tipo realizadas en el seno de los establecimientos.

Los objetivos de contenido que determinan el diseño de la operación, están marcados por otras operaciones similares. La encuesta se definió como una estadística de base que permitiese medir la aportación de cada una de las ramas de actividad al Producto Interior Bruto Regional, así como el conocimiento de su estructura productiva, de los principales servicios prestados y de los inputs utilizados en el proceso. Está primando, por tanto, la visión económico-contable, con el propósito de obtener resultados mayoritariamente cuantitativos sobre los flujos con que opera el sector que permitan hacer comparaciones y encuadrarlo en el ámbito de la Contabilidad Regional, proyecto prioritario para el Instituto.

Complementariamente esta estadística debería servir de base para mejorar y actualizar el directorio correspondiente y para el análisis de aspectos cualitativos sobre los contenidos de las diferentes partidas de ingresos y gastos y su generalización en el sector.

La materialización de estos objetivos supuso recabar información que al menos cubriese los siguientes aspectos:

- Colectivo ocupado y número de empresas y establecimientos.

- Cuentas económicas en términos de Contabilidad Nacional (de producción y explotación).

- Información sobre Ingresos y Gastos y otras características de los flujos de producción en términos de contabilidad privada.

- Datos cualitativos relativos a la frecuencia de las distintas partidas de ingresos y gastos, impuestos e inversiones.

La investigación se inició en Febrero de 1997 con el diseño del material de encuestación, el diseño y la instalación del software, la preparación del Directorio, la selección de la muestra, el envío de documentación a las empresas y la definición de la sistemática de trabajo. El trabajo de campo se llevó a cabo entre los meses de Julio a Diciembre, procediendose a la actualización de la muestra, recogida de los cuestionarios, grabación, y validación de los mismos. En Enero de 1998 se procedió a la actualización del Directorio en base a las altas, bajas y modificaciones generadas durante la operación y hasta finales de este año se ha realizado la depuración de los cuestionarios, el análisis de los resultados muestrales, el proceso de elevación y su análisis, la obtención del fichero extrapolado definitivo, la tabulación de resultados y la edición de la publicación.

Todas estas tareas se realizaron simultáneamente con las de la Encuesta de Actividad Económica al Sector Industrial, y Revisión parcial de los directorios de los sectores Industrial y de Servicios a empresas.

(1) "El Sector de Servicios a Empresas en la Comunidad de Madrid; Volumen I. Cuentas Económicas 1990; Volumen II. Directorio 1991". Departamento de Estadística, Consejería de Economía, Comunidad de Madrid.

1.2. Contenido de la publicación

La información que se incluye en este volumen comprende dos aspectos. Por un lado, como es norma en todas las publicaciones del Instituto, se describe detalladamente la metodología utilizada, ya que si bien no se dan importantes rupturas con respecto a los planteamientos metodológicos de anteriores operaciones, si se considera requisito indispensable dar a conocer al usuario el proceso de elaboración que define la operación con el fin de que pueda interpretar correctamente los resultados. En segundo lugar se recoge la explotación de los resultados estructurados en dos apartados.

El primero, denominado "Cuentas económicas", presenta los resultados cuantitativos obtenidos en la investigación y consta de los siguientes tipos de tablas:

- Tablas en términos de Contabilidad Nacional: Macromagnitudes y Cuenta de Explotación.

- Tablas sobre el personal ocupado y horas trabajadas por tipo.

- Tablas sobre el destino geográfico de las ventas.

- Tablas detalladas de ingresos y gastos en términos de contabilidad privada:

- Ingresos corrientes

- Compras y gastos corrientes

- Impuestos ligados a la actividad

- Operaciones de capital.

- Tablas sobre principales coeficientes analíticos.

El total del sector se presenta bajo un doble aspecto; en primer lugar, se consideran las ocho tablas mencionadas según una estratificación del empleo en tres estratos de tamaño (tablas 2.0.1) , en segundo lugar cruzadas por zonas geográficas distinguiendo entre cuatro grandes áreas (Madrid Capital, Zona Sur, Zona Noreste y Zona Oeste) y una sectorización a nivel inferior para el municipio de Madrid (tablas 2.0.2), y por último se presentan cuatro tablas resumen, en las que se cruzan macromagnitudes y coeficientes básicos por subzonas geográficas y distritos municipales del municipio de Madrid respectivamente (tablas 2.0.3).

El apartado responde básicamente a un criterio más sectorial que temático y aunque, como se indica en los epígrafes correspondientes, a lo largo de todas las fases de la operación se trabajó con un nivel mayor de desagregación en lo que respecta a la sectorización económica, el diseño no estaba concebido para ofrecer información suficientemente fiable a esos niveles.

El resto de los capítulos del apartado corresponden a la presentación de las ocho tablas tipo para cada una de las trece ramas de actividad consideradas.

El tercer apartado, titulado Análisis cualitativo de ingresos y gastos, analiza las respuestas "tiene" y "no tiene" recogidas en el cuestionario para cada tipo de ingreso y gasto. Se presentan siete tablas:

1. Estructura de clientes

2. Estructura de ingresos corrientes

3. Estructura de compras

4. Estructura de servicios exteriores

5. Estructura de gastos de personal, gastos financieros y amortizaciones.

6. Estructura de los impuestos

7. Estructura de las operaciones de capital

Estas tablas se refieren al porcentaje de establecimientos que afirmaron tenían esa clase de ingreso o gasto, por lo que suponen un complemento ideal de los datos cuantitativos, no sólo porque descienden a un nivel de detalle superior, sino porque orientan sobre la generalización o excepcionalidad de las distintas partidas, o lo que es lo mismo de la dispersión estadística, y permiten inferir el funcionamiento real de las empresas. A este respecto, esta información es incluso más descriptiva que los mismos datos cuantitativos. Ahora bien, es necesario advertir que estos resultados no se pueden interpretar con los mismos cánones de fiabilidad que los cuantitativos, por cuanto:

- Se refieren exclusivamente a datos muestrales, por lo que la estructura de los totales por sector, o el total general, no necesariamente representa de forma estricta al colectivo. En suma, están determinados por la estructura de la muestra obtenida que, como de detalla posteriormente, incide más en los establecimientos grandes.

- En sentido inverso, se establecen como medias aritméticas simples, es decir se da la misma importancia a cada establecimiento sea cual sea su tamaño. Esta solución (una entre las varias posibles) se ha tomado con el objetivo de valorar la generalización o dispersión de los distintos tipos de gastos e ingresos y no para medir su importancia (para ello están los datos cuantitativos). Esta cuestión se debe tener bien presente en cualquier análisis posterior.

- A diferencia de los cuantitativos, son datos más bien opináticos, con poca posibilidad de contraste, por lo que, salvo incoherencias con el resto de la información, no han sufrido un proceso de validación excesivo.

En definitiva, se puede interpretar que estos resultados presentan un error estadístico mayor, por lo que hay que utilizarlos como orientativos. Ahora bien, son totalmente significativos en términos generales y se aconseja su uso para conocer la auténtica estructura del sector.

Complementariamente, en el análisis de estos datos conviene recordar ciertas cuestiones que a veces, por muy evidentes, se olvidan; en particular, no hay que confundir la utilización de los diversos servicios con la contratación externa de ellos. Por ejemplo un bajo porcentaje de contratación de servicios de asistencia contable, no supone necesariamente que no se utilicen dichos servicios, sino que probablemente se realizan por el personal y a través de los recursos internos de la propia empresa.

Por otro lado, ciertos gastos externos que, en principio, parecen obligatorios para cualquier unidad productiva, pueden no aparecer, al menos como coste directo, en la contabilidad. Piensese, por ejemplo, en el gasto en suministros que parece imprescindible en toda empresa, y sin embargo existen edificios de oficinas que, por el coste del arrendamiento, prestan ciertos servicios adicionales al usuario entre los que puede estar incluido este concepto de gasto.

1.3. Unidad estadística. Ambito de la investigación

A la hora de diseñar una operación estadística de estas características aparecen, al menos, tres tipos de unidades, que pueden o no coincidir. Nos estamos refiriendo a:

- La unidad objetivo, de quien se recaba la información

- La unidad informante, a quien se dirige el cuestionario

- La unidad básica de elevación, extrapolación o de ponderación.

La unidad informante es tradicionalmente la empresa. Sin embargo resulta obvio que la unidad objetivo más favorable en este caso es el establecimiento, ya que la componente regional de este trabajo determina que no se deba considerar una unidad como la empresa o unidades superiores como grupos o holdings que, en general, tienen una localización geográfica múltiple no necesariamente englobada en una región, y también parece evidente la imposibilidad de acudir a unidades inferiores.

Esta decisión plantea en la práctica una dificultad en tanto que los sistemas contables de las empresas multilocalizadas no siempre permiten asociar los datos a cada uno de sus establecimientos, si bien, dadas las características del sector analizado en la mayoría de los casos ambas unidades coinciden.

Como unidad de elevación se ha considerado el número de ocupados, por ser probablemente la variable más correlacionada con todas las que son objeto de investigación.

En resumen, se han considerado tres unidades distintas: la empresa como unidad informante, el establecimiento como unidad objetivo y el ocupado como unidad básica de elevación.

Para definir el ámbito geográfico de la investigación, siguiendo las normas comunes, se utiliza la visión "interior" frente a la "regional". Es decir, el objeto de la investigación es el establecimiento ubicado dentro de los límites de la región, con independencia de la localización de la sede de la empresa o del lugar de residencia de los trabajadores y propietarios.

Aunque resulte obvio, insistimos en que no se debe olvidar que, en consecuencia, el número de trabajadores que se consideran a efectos de este trabajo no tiene por qué coincidir con el número de residentes en Madrid que trabajan en el sector, ni el número de establecimientos es homologable al número de empresas con sede social en la Comunidad.

1.4. Delimitación de la actividad económica investigada. Clasificaciones sectoriales

Si bien cualquier operación estadística exige algún tipo de precisiones para conseguir una delimitación exacta del ámbito de la investigación, esta tarea resulta aún más necesaria en el caso del sector Servicios a empresas.

En la literatura económica no existe un consenso general sobre las actividades que engloba y su misma denominación es, cuando menos, ambigua y desafortunada. Generalmente se delimita en términos marginales, señalándose que son servicios que se prestan principalmente a las empresas, por contraposición a los personales y colectivos, pero esta misma característica se da en otras actividades, como las de intermediación financiera o el transporte, que nunca han sido incluidas en el sector.

En segundo lugar el conjunto de actividades que tradicionalmente se consideran bajo esta denominación, son manifiestamente heterogéneas. No se les puede caracterizar, sin más, como servicios avanzados, ni como servicios relacionados con la información, ni como sector cuaternario y, ni siquiera en términos estrictos, porque sean, en todos los casos, servicios a la producción o servicios prestados primordialmente a empresas.

Desde un punto de vista estadístico, estos temas suelen dirimirse acudiendo a las clasificaciones internacionales de actividad económica o a sus reflejos nacionales, con el fin de permitir la comparabilidad en el tiempo y el espacio.

En enero de 1993 entró en vigor la nueva Clasificación Nacional de Actividades (CNAE-93) derivada de las nuevas clasificaciones referidas a actividades económicas en Europa (NACE-90). En estas clasificaciones, los servicios a empresas se engloban dentro de la sección K "Actividades inmobiliarias y de alquiler; servicios empresariales", concretamente en las divisiones 72 (actividades informáticas), 73 (investigación y desarrollo) y 74 (otras actividades empresariales); estas tres divisiones son las que se han incluido en este trabajo.

No obstante, dado que no hay una denominación precisa de uso común, vamos a describir el contenido exhaustivo de lo que a efectos de este trabajo se considera servicios a empresas y la sectorización diseñada a 13 ramas.

1. PUBLICIDAD

Denominación en tablas: publicidad.

CNAE-93: 74.4

Engloba la creación y realización de campañas publicitarias, la distribución en medios de mensajes publicitarios incluidos los servicios de las denominadas centrales de compra de medios, las actividades de los agentes de publicidad y de otros intermediarios publicitarios, y las actividades anexas a la publicidad y la prestación de otros servicios publicitarios.

2. ACTIVIDADES INFORMATICAS

Denominación en tablas: informática

CNAE-93: 72

Recoge las actividades de las unidades especializadas en análisis de objetivos, necesidades y medios de equipo informático; las actividades especializadas en asesoría y consultoría de software, desarrollo, suministro y edición de todo tipo de aplicaciones informáticas; las actividades de creación, desarrollo y mantenimiento de bases de datos y la explotación comercial de la información contenida en dichas bases (excluyendo el mailing y la edición de catálogos o listados, si se realizan separados de la propia explotación); las actividades generales de registro y procesamiento electrónico de datos, (que constituyen la actividad clásica de los llamados centros de cálculo); las actividades de las unidades especializadas en prestar asistencia técnica, mantenimiento y reparación de equipos informáticos y maquinaria de oficina de todo tipo (se excluyen estas labores cuando se realizan en combinación con la venta o la fabricación de maquinaria de oficina o equipos informáticos); y, por último, otras actividades relacionadas con la informática, como la formación al usuario en aplicaciones informáticas (excluyendo el desarrollo de software de tipo tutorial, y la enseñanza de informática), y otras actividades relacionadas con la informática n.c.o.p.

3. INVESTIGACION Y DESARROLLO.

Denominación en tablas: investigación y desarrollo.

CNACE-93: 73

Aunque en la CNAE se engloban en este epígrafe todas las actividades de I+D, excepto la realizada en centros de enseñanza superior, a efectos de este trabajo sólo se consideran las privadas. Ahora bien, hay que tener en cuenta que la unidad de investigación es el establecimiento, es decir, en este contexto, las unidades separadas físicamente cuya actividad sea la investigación (con independencia de que la empresa en su conjunto se dedique a otra actividad) y que, en consecuencia, se considera como ventas (aunque ficticias) los flujos entre distintos establecimientos de una misma empresa. Teniendo en cuenta estos criterios, se incluyen aquí las empresas, o partes de empresas que constituyen establecimientos, cuya actividad principal sea I+D, excluyendo la investigación pública o la realizada por instituciones de enseñanza. Así pues, los resultados de este subsector no recogen más que una parte pequeña de la investigación que se realiza en la Comunidad de Madrid, ya que esta actividad se encuentra en su mayor parte "internalizada" en las empresas, en unidades que no constituyen establecimientos. Aunque la investigación que aquí se contempla se refiere tanto a la básica como a la aplicada, y tanto a la dedicada a las ciencias naturales y técnicas como las ciencias sociales y humanidades, en la práctica este subsector está formado esencialmente por establecimientos especializados en investigación técnica aplicada, generalmente dependientes de empresas suya actividad no es la investigación. Además suele ocurrir que estas unidades realizan otras actividades secundarias, como ingeniería, diseño industrial o incluso transformación industrial.

4. ASESORAMIENTO JURIDICO.

Denominación en tablas: asesoramiento jurídico

CNAE-93: 74.11

Recoge los servicios de los procuradores en los tribunales y otros servicios de representación, asesoramiento o documentación jurídicas en cualquier materia (penal, civil y mercantil, laboral, internacional, pública, etc.). No se incluyen las actividades de la Administración de Justicia (jueces, fiscales, etc.) También se incluye la actividad de los registros oficiales (como mercantil, de la propiedad, civil, patentes y marcas) y de las notarías.

5. ASESORAMIENTO ECONOMICO.

Denominación en tablas: asesoramiento económico.

CNAE-93: 74.12, 74.14 y 74.15

Recoge los servicios de contabilidad (teneduría de libros contables, preparación de cuentas, balances, informes financieros, etc.), el asesoramiento contable para terceros y los servicios de asesoramiento fiscal y gestión para declaración de impuestos o gestión tributaria general, así como los servicios (no jurídicos) de representación ante el fisco; los servicios de auditoría contable para terceros y de los censores jurados de cuentas (se excluye la actividad de los Tribunales de Cuentas o la que realizan las administraciones públicas para sus fines); y las actividades de asesoramiento en estrategia empresarial (planificación estratégica, viabilidad, planificación de inversiones, estudios para creación, fusión o cierre de empresas, etc.), en implantación de sistemas de gestión (implantación y planificación de proyectos, gestión directa de empresas, gestión financiera, control presupuestario...), en comercialización de productos (organización y control de ventas...), valoración de bienes, empresas y grupos, en comercio exterior, en política de personal, relaciones públicas y asesoría de imagen, etc.., la gestión administrativa y las actividades de gestión de holdings no financieros.

6. ESTUDIO DE MERCADOS Y REALIZACION DE ENCUESTAS DE OPINION PUBLICA

Denominación en tablas: estadística y estudio de mercados.

CNAE-93: 74.130

Recoge los servicios de estadística y de sondeos generales y la elaboración de estudios económicos (generales o sectoriales), sociales y demográficos, por cuenta de terceros; y los estudios de mercado comerciales para terceros, a veces llamados mercadotecnia directa, los sondeos comerciales, cómputos de difusión, audiencia o circulación, elaboración de encuestas sobre hábitos de compra y consumo y estudios similares destinados a la promoción o control de ventas e implantación o análisis de los mercados. No incluye las actividades de los institutos oficiales o departamentos de estadística o de estudios de las administraciones públicas.

7. SERVICIOS TECNICOS DE ARQUITECTURA E INGENIERIA

Denominación en tablas: arquitectura e ingeniería.

CNAE-93: 74.201 y 74.202

Recoge la actividad de los estudios de arquitectura (proyectos de edificación y de rehabilitación de edificios y complejos inmobiliarios...) y de urbanismo (planes urbanísticos, paisajismo, jardinería, iluminación, parques naturales, instalaciones turísticas y otros servicios técnicos de urbanismo); y los servicios técnicos de ingeniería de todo tipo, como electrónica, de construcción, de obras e infraestructuras, hidrología, energía, minería, de construcción naval o aeronáutica, ingeniería industrial y otras.

8. OTROS SERVICIOS TECNICOS.

Denominación en tablas: otros servicios técnicos.

CNAE-93: 74.203, 74.204, 74.301 y 74.302

Recoge el asesoramiento e investigación en prospecciones hidrológicas o de hidrocarburos (incluso perforación con fines de investigación) y la realización de estudios geológicos, excluyendo las actividades de extracción de cualquier tipo, salvo cuando se realizan como prueba dentro de los estudios señalados; los servicios técnicos independientes de topografía, cartografía, fotogrametría, delineación y otros generalmente destinados al levantamiento de mapas y planos; los ensayos de materiales, ensayos en modelos reducidos, control y certificación de calidad (incluso organismos reguladores), homologación, estudios sobre normas y especificaciones y otros ensayos, controles y estudios similares; y los estudios agrarios y biológicos: investigaciones agrícolas y forestales (edafología, tecnología de cultivos, tipificación de productos, silvicultura y recursos forestales, concentración parcelaria, etc.), investigaciones ganaderas (explotación y mejora ganadera, higiene y sanidad animal, etc.), estudios sobre pesca y desarrollo pesquero, acuicultura y piscicultura, y otros estudios agrarios y biológicos; los servicios de diseño industrial (no se incluye el diseño de modas, las actividades artísticas ni el diseño gráfico y similares), los servicios técnicos de investigación operativa (viabilidad técnica, asesoramiento en transferencia de tecnología, etc.), estudios técnicos de organización de la producción (diagnósticos en organización y métodos de producción, simplificación de procesos, implantación de sistemas robotizados, etc.) y otros estudios y servicios técnicos no clasificados en otra parte.

9. SELECCION Y COLOCACION DE PERSONAL.

Denominación en tablas: Selección y colocación de personal.

CNAE-93: 74.5

Recoge las actividades de las agencias generales de investigación de ofertas y demandas de empleo y contratación de personal, las empresas de recolocación, incluso aunque incorporen un cierto reciclaje del personal (consultoras de outplacement), las agencias especializadas en selección y colocación de altos directivos (management consultores, head-hunter o "cazadores de cerebros"), agencias de contratación de servicio doméstico, gabinetes de psicólogos especializados en selección de personal para terceros y actividades similares (excepto las especializadas en selección de artistas y deportistas); y las actividades de subcontratación de mano de obra para terceros.

10. SERVICIOS DE SEGURIDAD Y ACTIVIDADES DE INVESTIGACION PRIVADA

Denominación en tablas: seguridad e investigación privada.

CNAE-93: 74.60

Incluye las siguientes subactividades:

Recoge las actividades de los detectives y de las agencias de investigación privadas, excepto las especializadas en prestar información sobre solvencia y comportamiento económico de particulares y empresas; las actividades especializadas en prestar servicios de vigilancia para terceros; y las actividades de transporte blindado y de seguridad, las actividades de protección y seguridad armada, las actividades de las centrales de alarma y control motorizado y otras actividades de protección y seguridad n.c.o.p..

11. ACTIVIDADES INDUSTRIALES DE LIMPIEZA DE INTERIORES

Denominación en tablas: limpieza de edificios.

CNAE-93 : 74.70

Recoge la limpieza general de interiores de edificios y locales (excepto servicio doméstico para el hogar) , la limpieza especializada (cristales, chimeneas, etc.), y la desinfección, desratización y desinsectación (excepto la lucha contra plagas agropecuarias). No incluye la limpieza, revoque o arreglo de fachadas o tejados.

12. ESTUDIOS Y LABORATORIOS FOTOGRAFICOS

Denominación en tablas: estudios y laboratorios fotográficos.

CNAE-93 : 74.81

Recoge los servicios de revelado, positivado, copia o ampliación de rollos y fotografías u otros similares que normalmente prestan los laboratorios fotográficos; y la elaboración de retratos y fotografías de todo tipo (familiares, comerciales, publicitarias, artísticas, fotografía técnica, etc.) ya se realicen en el propio estudio, en el exterior o incluso a través de máquinas automáticas. No incluye estas labores cuando se realizan en combinación con la producción de películas de cine, video o televisión o con la elaboración de reportajes para prensa, revistas, libros o similares.

13. OTROS SERVICIOS PROFESIONALES

Denominación en tablas: otros servicios profesionales

CNAE-93: 74.82, 74.83 y 74.84

Recoge los servicios de mecanografía, incluso a través de procesamiento electrónico de textos, taquigrafía y reprografía (no incluye los servicios de grabación o tratamiento de datos para su procesamiento electrónico posterior, ni se incluyen estas labores cuando se realizan en combinación con imprentas y similares); las actividades administrativas anexas a la distribución publicitaria (servicios de contestación telefónica, mailing y similares); los servicios especializados de llenado de botellas, latas, aerosoles, etc., el empaquetado y envasado de medicinas, cosméticos y otros productos , el etiquetado de productos y envases , para terceros, siempre que se realicen con independencia de la venta, transporte o fabricación de dichos productos o envases; la traducción de documentos, el servicio de interpretes y de traducción simultánea; el diseño de modas (textiles, calzado, joyería, muebles, etc.) y decoración de interiores (excepto la actividades puramente artísticas y el diseño industrial, diseño gráfico o similares); los servicios de investigación especializados en obtener información, para terceros, sobre solvencia y comportamiento económico de personas o empresas; los servicios de las azafatas de congresos y los de organización de congresos, ferias y similares; las actividades de representación de artistas, deportistas y otros profesionales del espectáculo y otros servicios de corte profesional no contemplados en otras partidas. No incluye los servicios de selección y contratación de artistas y deportistas, los de mensajería, los de los profesionales del periodismo y agencias de noticias, ni todo tipo de servicios personales, recreativos, culturales o prestados a la colectividad. Tampoco se incluyen los intermediarios del transporte o del comercio, las agencias de transporte, comisionistas y similares, los servicios de los intermediarios financieros (incluidos seguros) o los auxiliares de la intermediación financiera, el asesoramiento inmobiliario y servicios inmobiliarios, ni los servicios de alquiler o de leasing de ningún tipo.

1.5. Directorio inicial y sus actualizaciones. Estimación del colectivo

Uno de los principales problemas que se plantean en la realización de estadísticas económicas es poder disponer de un directorio exhaustivo y actualizado, máxime si se trata de actividades terciarias del tipo de las aquí analizadas. Es tal la movilidad, complejidad y, en muchos casos ambigüedad del sector, que resulta imposible saber cuántas y cuáles son las unidades que están operando en un determinado momento. Por lo tanto no queda mas remedio que aceptar que, mientras no cambien radicalmente las condiciones estadísticas, cualquier directorio de este tipo será necesariamente bastante imperfecto y no se podrá utilizar, sin más, para estimar el colectivo total de dicha actividad. Añadamos que, en general y también en nuestro caso, los directorios se refieren a establecimientos y empresas y, por tanto, no recogen profesionales o autónomos que no dispongan oficialmente de establecimiento o local, lo que en estas actividades supone no contabilizar un porcentaje importante del sector.

Con todo, es indudable que el directorio, más o menos imperfecto, es fundamental para el conocimiento de un sector económico y, por supuesto, para plantear cualquier investigación estadística.

El directorio utilizado en este trabajo ha sido el Directorio de Servicios a Empresas del Instituto de Estadística de la Comunidad de Madrid, integrado en la Base de Datos de Actividad Económica de la Comunidad de Madrid (B.A.D.E.C.A.M.).

Como ya hemos señalado con anterioridad, uno de los objetivos de la encuesta es la actualización del propio directorio marco a través de los documentos que genera la encuesta, principalmente hoja de ruta y cuestionario. Con ellos se incorporan las altas, bajas y modificaciones detectadas en los registros muestrales en materia de la actividad principal del establecimiento, del empleo medio anual, o de datos relativos a la denominación y localización de las empresas y establecimientos; no obstante la BADECAM se actualiza periódicamente a través de operaciones específicas realizadas por el Instituto, tendentes a su constante mejora.

A pesar de la mejora sustancial del Directorio en relación a operaciones anteriores, como era previsible, se detectaron bastantes incidencias (bajas, fusiones, cambios de actividad o detección de errores en la codificación, traslados, cambios de nombre, etc.), merced a la complejidad y movilidad del sector, tal y como veremos detalladamente en el epígrafe relativo a la muestra, a pesar de lo cual, el directorio final se puede considerar razonablemente válido.

Ahora bien, debido a los problemas señalados en el primer párrafo de este epígrafe, hubo que estimar parte del colectivo a través de fuentes externas. En concreto, el directorio de 1996 actualizado recogía 104.699 empleos frente a los 137.964 ocupados que se estimaron finalmente; es decir que su nivel de cobertura se puede cuantificar aproximadamente en el 76%. La diferencia entre ambas cifras, calculadas por grupos de actividad según la sectorización a 35 subramas, es lo que se denomina residuos de empleo.

Dichos residuos no se incorporan a ninguno de los estratos en que se clasifica el empleo por no disponer de información suficiente para su distribución, y haberse comprobado que la ausencia de registros afecta a todos los estratos de tamaño. En las tablas del capítulo 2 se denominan "SIN ASIGNAR A ESTRATO", cuando se realiza una distribución por empleo y, "SIN ASIGNAR A ZONA", cuando la clasificación utilizada es la zona geográfica.

1.6. Muestra y respuesta obtenida

El tema del muestreo en la investigación económica del tipo que se presenta es materia controvertida dadas las características de la unidad de encuestación y el contenido o conjunto de cuestiones que se le demanda.

En efecto, por un lado, la heterogeneidad en el comportamiento, organización, estrategia, proceso productivo, etc., hace difícil encontrar conglomerados de unidades en los que unas cuantas representen, en todos sus aspectos, a otras. Las clasificaciones que se usan para organizar una realidad tan compleja son útiles y necesarias pero limitadas a estos efectos.

Por otro lado, la cantidad de aspectos o variables que se quiere estimar a través de la encuesta y, en muchos casos, el bajo nivel de correlación entre las mismas parecen indicar que, llevando la teoría muestral a sus últimas consecuencias, habría que elegir el método censal como alternativa. Todo esto se acentúa a medida que el establecimiento sea mayor, la actividad sea menos homogénea y el universo sea menor.

No obstante, plantear la solución censal exige resolver otro tipo de problemas de muy diversa índole. A nadie se le escapa que el primero es el coste de la operación que, en muchos casos, la haría inabordable. Otro sería la duración del trabajo que se podría extender en el tiempo dada la amplitud de la investigación. También habría que suponer que el directorio que define el colectivo es completo y está totalmente actualizado. Unido a éstos, aparece el problema de la no respuesta, por lo que al final siempre se desemboca en una muestra, mayor o menor, y más o menos adecuada para representar al colectivo.

La alternativa muestral presenta unas ventajas comparativas evidentes como son su menor coste, su tratamiento más simple y que, aunque se trate de un subconjunto, su composición se ha determinado a priori fijando criterios de proporcionalidad y representatividad de la población. Con todo, es tal la heterogeneidad de las unidades de un cierto tamaño, ante las variables que se investigan, que la decisión que normalmente se toma es una combinación entre censo y muestra. En concreto, se investigan censalmente las unidades mayores o las que desarrollan una actividad preseleccionada y se define una muestra para el resto. Esta es la opción que se eligió en este trabajo, como en otros anteriores, que pretende aunar las ventajas comparativas de censo y muestra.

Tomada esta solución, hay que considerar otros muchos elementos antes de definir la estructura concreta de la muestra. Normalmente se acepta que en colectivos de este tipo se puede obtener una cierta homogeneidad si se estratifica la muestra en función de la actividad principal de la unidad y su tamaño (medido en términos de número de ocupados). La variable geográfica en regiones como la Comunidad de Madrid parece tener poca importancia en cuanto a temas productivos.

Desde estas premisas se puede hablar de una "esperanza de respuesta" sobre muestra inicial que determine el número total de establecimientos a visitar en base a un "objetivo de respuesta". Este último se fijó, en función del presupuesto y de las experiencias previas, en unas 650 encuestas y para ello se estableció una muestra total de 1.500 establecimientos. Desde el punto de vista de la utilidad final, esta decisión resultaba muy interesante pues, si bien sólo se esperaba obtener unos 650 cuestionarios completos, se dispondría de cierta información del resto a través de la hoja de ruta, lo que supondría una mejora del directorio de partida.

Determinado el número total de visitas, se procedió a distribuirlas de forma óptima, particionando el directorio por actividad (34 subramas) y según nivel de empleo (cinco estratos de tamaño :hasta 9 ocupados, de 10 a 19, de 20 a 49, de 50 a 99 y más de 100 ocupados). Con ello se estableció:

a) Parte censal (o marco de lista), determinada por:

- Todos los establecimientos mayores de 49 ocupados.

- Todos los establecimientos de estratos inmediatamente inferiores cuando los establecimientos censales no cubriesen el 20 por ciento del empleo total en la actividad referida.

En suma, el marco de lista quedó constituido por 526 establecimientos que representaban un 69 por ciento del total del empleo recogido en el directorio.

b) Parte muestral.

Los 974 registros restantes se seleccionaron por estratificación (utilizándose como variables de clasificación la actividad principal y el nivel de empleo), de forma sistemática, con arranque aleatorio, con cuota proporcional pero teniendo en cuenta las siguientes restricciones:

- En cada casilla de cruce se selecciona el número de unidades suficientes que salvaguarden, con la esperanza de respuesta prevista, el secreto estadístico.

- Para evitar el sobredimensionamiento de algunas celdas se establece la segunda restricción: que las unidades a seleccionar de un determinado grupo no superen x veces la media de elementos por casilla.

Estas últimas restricciones dan a la muestra final un carácter más uniforme (y menos proporcional) de cara a asegurar una cobertura mínima en todos los casos y evitar una concentración excesiva en casillas supuestamente homogéneas.

De la investigación en campo resultó una muestra válida de 1.085 establecimientos lo que representa más del 72 por ciento de la muestra inicial. Aparecieron 415 no encuestables por diversos motivos (cierres, ilocalizables, actividad no encuestable, etc..).

Sobre la muestra válida, el porcentaje de respuesta fue del 56 por ciento, contestando completamente y de forma coherente al cuestionario 671 establecimientos, que recogían 53.579 empleos, lo que representa aproximadamente el 51 por ciento del colectivo recogido en el directorio marco.

1.7. Cuestionario utilizado. Hoja de Ruta

Como se ha señalado en epígrafes anteriores, los principales objetivos de esta operación consistían en investigar el colectivo de empresas y establecimientos del sector servicios a empresas de la Comunidad de Madrid, sus cuentas económicas en términos de Contabilidad Nacional y de contabilidad privada detallada y otros aspectos estructurales del sector. El cuestionario, en consecuencia, debería ser la plasmación física de estos objetivos.

Ahora bien, el cuestionario es la pieza básica de comunicación con el informante y tiene una importancia decisiva en la calidad, e incluso en la cantidad, de la respuesta y del tratamiento posterior de la información. En este caso, siguiendo la línea ya emprendida y, aprovechando la experiencia previa, se ha realizado un esfuerzo especial en su diseño, partiendo de las siguientes premisas:

- El cuestionario debe recoger exclusivamente la información precisa para cumplir los objetivos de la investigación, de la forma más reducida posible. Este mismo criterio se puede formular en términos de que debe existir una razonable correspondencia entre la información que se solicita y la que posteriormente se ofrece al usuario en la publicación de resultados.

- Debe ser lo más homologable posible con otras investigaciones similares, respetando el mismo contenido y significado de las partidas y la misma estructura. El objetivo final es diseñar al menos una parte común para todos los cuestionarios de información económica de flujos productivos, sea cual sea el sector o colectivo a que se refiera.

- Debe facilitar al máximo la respuesta al informante. Para ello la primera condición es solicitar precisamente la información tal como está en poder del informante, sin exigencias de desagregaciones innecesarias o estimaciones groseras. Esto supone una adaptación máxima al Plan General de Contabilidad. Las correspondencias necesarias para transformar sus partidas en las de la Contabilidad Nacional u otro esquema se realizan posteriormente.

- En el mismo sentido, las preguntas deben ser claras y autoexplicativas, es decir, que el informante no tenga que acudir a complejas instrucciones complementarias para captar plenamente el contenido de la respuestas que se le solicita. Se trata de reducir al máximo las instrucciones externas e incluir las aclaraciones necesarias en las propias preguntas. En este aspecto, el cuestionario debe ser lo más completo posible (solucionando el mayor número de dudas que se puedan plantear en su cumplimentación), lo que no tiene por qué estar reñido con la claridad y la sencillez.

- El cuestionario (y su gestión) es la pieza clave en el tratamiento posterior de la información. Por tanto, su diseño debe estar especialmente pensado para posibilitar y facilitar las tareas posteriores de grabación, validación, depuración, elevación y explotación de la información. Para ello se requiere una estructura lógica de apartados y preguntas y consistencia en el orden de respuesta. También aquí se puede hablar de preguntas autovalidables en sí mismas o en conjunto con otras (por ejemplo, a través de totalizadores parciales o por caminos lógicos). Este problema se resolvió utilizando un diseño con estructura de grafo, que en términos de la nueva metodología implantada se denomina Grafo-test. Dicha técnica se ha aplicado no solamente en el cuestionario, sino en todos los documentos anexos y de control, e incluso en la forma de diseñar toda la operación de modo sistemático e integral. Para ello se dispuso de herramientas informáticas capaces de gestionar la operación en estos términos, como describe el epígrafe posterior.

Por otro lado, otro objetivo de la investigación consistía en disponer de un elemento eficiente de control de las tareas de campo y de actualización sistemática del directorio, aún en los casos de negativa a la cumplimentación del cuestionario. Para ello se diseñó una hoja de ruta ad-hoc (que es el documento que utiliza el encuestador para hacer todas sus anotaciones de campo de forma sistematizada) aunque generalizable para encuestas de este tipo.

La hoja de ruta, complemento obligado del cuestionario en cualquier investigación estadística, se diseñó también en forma de Grafo-test y cumplió las siguientes funciones:

- Servir de manual de instrucción para el propio agente-encuestador y de sistema de homogeneización de los datos de campo.

- Control de las incidencias de campo (empresa no localizada, cerrada, duplicada en el directorio, no encuestable, negativa, encuestada, etc.).

- Control de las modificaciones en la identificación y localización de la unidad de encuestación (razón social, dirección completa, código postal, etc.).

- Determinación del empleo, actividad principal, NIF y otros datos de la empresa y el establecimiento, para actualización del directorio, incluso en el caso de no respuesta al cuestionario.

- Control de los agentes-entrevistadores (contactos telefónicos, visitas, recogidas, inspección...).

- Información sobre la persona de contacto en la empresa.

La hoja de ruta era cumplimentada por el propio agente-entrevistador en sus visitas a la empresa y se grababa inmediatamente, con lo que fue posible obtener tablas de resultados de encuestación de manera rápida a cualquier fecha y mantener un control de campo efectivo en todo momento.

1.8. Sistematización de trabajos y tratamiento informático

Un objetivo prioritario en todas las operaciones realizadas por el Instituto consiste en avanzar en el proceso de sistematización, objetivación y mejora del diseño, recogida y tratamiento de la información estadística, cuestión que sólo es posible abordar con ayuda de la informática. Ahora bien, no es suficiente la incorporación de la informática, sino que se deben implantar métodos objetivos y rigurosos, perfectamente reproducibles, e independientes, al máximo posible, de las personas concretas que las llevan a cabo; ésta es la particularidad de lo que venimos llamando industrialización de la estadística.

La sistematización del tratamiento de la información es determinante en cualquier encuesta y se debe aplicar desde la primera a la última fase del proceso. En este planteamiento, se ha utilizado un nuevo enfoque globalizador, entendiendo que las tareas estadísticas deben ser perfectamente coherentes entre sí, lo cual implica que, aunque se puedan dividir en etapas, los problemas y soluciones de cada una de ellas se insertan en la problemática común de toda la operación. En consecuencia, las herramientas informáticas de apoyo han sido diseñadas con esta misma filosofía.

A continuación se describe de forma resumida las grandes fases del trabajo realizado, así como las soluciones tomadas en cada caso y el software utilizado.

1.8.1. Diseño general, preparación y gestión de los trabajos de campo

Con la perspectiva unitaria con que se ha planteado el trabajo, la fase de diseño inicial es absolutamente determinante y delimita completamente todas las acciones a llevar a cabo en fases posteriores.

Una vez definidos los objetivos, el diseño general de la operación debe tener en cuenta no sólo los aspectos más obvios (como el directorio, la muestra, el cuestionario, etc.) sino todos los elementos integrantes de la operación, desde la disponibilidad y organización de recursos y medios, hasta el último control de validación o el plan de publicación previsto. En este caso, se marcó el objetivo de disponer de la versión definitiva de todos los factores de diseño metodológico antes de iniciar la recogida de información. De forma resumida, estos elementos se pueden agrupar en:

1. Apoyos y contactos institucionales (acuerdos y relaciones con otros organismos, etc.). Cartas de presentación, credenciales, etc.

2. Medios humanos y materiales, formación y organización, manuales y otro material de campo y encuestación.

3. Equipos informáticos y sotfware; desarrollo de aplicaciones integradas de uso general para cada fase del trabajo.

4. Diseños técnicos iniciales. Conceptos y clasificaciones, unidades de encuestación, directorio, muestra, cuestionario, hojas de ruta, etc.

5. Criterios de tratamiento de la información; preparación de directorios, control de campo, definición de planes y programas de grabación, validación, depuración, elevación, explotación, actualización del directorio, etc., y su implantación en el software adecuado.

6. Diseño de la publicación, ficheros finales, formas de difusión, etc.

Una vez determinados y preparados todos los elementos del diseño general, se estaba en condiciones de abordar la recogida de información.

Tras la preparación del material de campo (rutas, etiquetas, cartas, etc.), la operatoria concreta del trabajo de campo se llevaba a cabo normalmente en dos etapas, aunque ello dependía de las diversas situaciones que se daban. Cada encuestador recibió un listado de empresas a visitar según rutas obtenida por criterios de proximidad. Tras contacto previo, y con carta de presentación y acreditación de la Comunidad de Madrid, se desplazaba a cada unidad seleccionada y en la primera visita trataba de cumplimentar totalmente la correspondiente hoja de ruta, donde se anotaban las incidencias de campo, las principales características de la empresa y cualquier observación pertinente para la gestión de campo; a la vez explicaba el cuestionario al informante y, si ello era posible, ayudaba a cumplimentarlo en ese momento o, más a menudo, acordaba una nueva visita para recogerlo, revisarlo y aclarar con el informante las posibles dudas de cumplimentación.

En esta segunda visita, normalmente tras una serie de contactos telefónicos, se obtenía el cuestionario y se revisaba en presencia del informante para asegurar la cumplimentación correcta. Esta revisión se realizaba de manera sistemática a través de una hoja de control, que recogía los principales aspectos del contenido de la información recibida, la claridad de los literales, la lógica del grafo y otros elementos pertinentes (sumas, algunos ratios económicos, etc.). De esta forma se valoraba inicialmente la calidad de la información, facilitando la posterior validación de cuestionarios.

Periódicamente el encuestador entregaba en la oficina las hojas de ruta y cuestionarios cumplimentados para su inmediata grabación.

1.8.2. Grabación y validación.

Aunque se tratan aparte por motivos de claridad, las fases de grabación y validación se realizaron en paralelo a la recogida de datos y, de hecho parte de las mismas, se consideran como etapas del trabajo de campo .

La grabación y validación, junto con el control del trabajo de campo, se realizaron a través de la herramienta denominada GRAFO-WIN. Los cuestionarios y hojas de ruta cumplimentados se grabaron inmediatamente a su llegada, se realizaban las codificaciones pertinentes y posteriormente pasaban un plan de validación que controlaba los errores formales y de contenido que pudiesen existir en los documentos mencionados.

La validación utilizada constaba de tres tipos de controles:

A: Controles de rango y grafo. Validan el rango prefijado en cada campo de información y el grafo asociado, o relación entre campos, según órdenes explícitas del documento.

B: Controles de coherencia aritmética (generalmente sumas).

C: Controles de coherencia interna del documento .En el caso del cuestionario, se basan en relaciones de tipo económico, y se utilizaron un conjunto de test que controlaban en especial el valor y las interrelaciones de las siguientes variables:

- Actividad principal del establecimiento.

- Personal ocupado y horas trabajadas.

- Gastos de personal.

- Facturación e ingresos.

- Gastos intermedios de explotación.

- Impuestos.

- Inversión

- Resultados globales (producción, valor añadido, excedentes).

Los controles se pasaron en el orden descrito. Los errores no imputables a la grabación, o aquellos que no se podían solucionar directamente, originaban una llamada telefónica al informante para su corrección o confirmación de cifras. Se marcó el objetivo de que la distancia temporal entre la llegada del documento y el eventual contacto con el informante para la corrección de errores no superase los diez días, aunque este particular no se pudo cumplir en todos los casos.

Se consideró finalizada la fase de recogida de información cuando todos los documentos superaron la validación.

1.8.3. Depuración, tabulaciones y ficheros intermedios, elevación y obtención de resultados finales.

Simultáneamente a la recogida de cuestionarios se realizó la tabulación y el análisis de resultados muestrales y de la cobertura obtenida, que fue satisfactoria y se ajustó a lo previsto. Una vez finalizada la validación se inició la depuración, una de las fases que permanece todavía oscura y poco sistematizada dentro del proceso estadístico.

La depuración se puede interpretar como una segunda validación en la que el apoyo para correcciones no se basa en la consulta con el informante, sino en la información externa existente (p.e., de la misma operación en años anteriores, de información similar en otros ámbitos, etc.), los conocimientos previos que se tienen del sector, la comparación entre distintos cuestionarios de características similares (o uno frente a la media del sector/estrato correspondiente) y la información cualitativa que se obtiene del propio trabajo de campo (como la que se acumula en observaciones). El objetivo de esta fase es eliminar respuestas inconsistentes y estimar vacíos de información para asegurar la coherencia y calidad de los resultados finales.

Siendo puristas, la depuración introduce un elemento subjetivo poco recomendable en el proceso estadístico y es contraria a la idea de sistematización y objetivación de la información. Sin embargo, como bien conoce cualquier estadístico económico, la respuesta del informante no siempre tiene el nivel de calidad deseado, detectandose incoherencias motivadas por diferentes causas , si bien es verdad que esto ha ido mejorando a lo largo de los tiempos y que suele disminuir cuando se repiten periódicamente las encuestas.

En la situación actual, la depuración es necesaria pero se debe intentar reducir al máximo, lo cual sólo se consigue si se ponen los medios adecuados en las fases anteriores. En este trabajo fue posible simplificarla en gran medida reforzando la validación vía informante, puesto que se habían obtenido unos resultados de campo válidos en términos generales. En cualquier caso, se tiene previsto un análisis posterior de la importancia de la depuración realizada con respecto a los resultados finales, que permitió cuantificar este aspecto.

Otro elemento negativo de la depuración es que el Instituto de Estadística aún no ha desarrollado una herramienta informática que sistematice al máximo el proceso y facilite la ayuda necesaria en la toma de decisiones. En ese sentido se están dando los pasos pertinentes, pero aún no existe un método generalizable y medianamente objetivo de depuración e imputación automática, sobre todo en lo que respecta a datos cuantitativos.

La depuración se diseñó en base a los controles previamente definidos en la validación. El resultado final fue un fichero con la misma estructura que el de resultados de validación, que se convirtió en definitivo tras la tabulación y el análisis derivado. Dicho fichero dio origen a dos que, a partir de aquí, llevaron procesos independientes: fichero de datos cualitativo (principalmente los datos del "tiene" y "no tiene" del cuestionario) y fichero de datos cuantitativos (valores económicos), incorporando ambos los campos de identificación de cada unidad.

Uno de los avances del Instituto en estos últimos años ha sido la creación, en colaboración con la empresa SOCIOMATICA, de una herramienta informática de carácter general, que sistematiza la fase de elevación o extrapolación de los datos cuantitativos de la muestra al colectivo, que ha sido bautizada con el nombre de MEGA (Método de Elevación General Asistida). Esta herramienta se basa en una filosofía algo diferente a la que se ha utilizado normalmente en los procesos de elevación. Parte del hecho de que la elevación o extrapolación no es más que un proceso de estimación de registros sobre los que se tiene cierta información (colectivo no investigado), completado en su caso por registros residuales, a través de otros sobre los que se tiene información completa (muestra válida obtenida). En principio resulta equivalente utilizar un multiplicador sobre los datos de la muestra para estimar el colectivo o estimar éste individualmente en función de los datos de la muestra, en el sentido que ambos ofrecerían resultados idénticos si se partiera de las mismas premisas. Ahora bien, el segundo método ofrece claras ventajas comparativas en lo que respecta a claridad del proceso, tratamiento de la falta de cobertura en alguna casilla y posibilidad de tabulaciones finales en función de variables no contempladas a la hora de selección de la muestra. Por otro lado, el primer método no es más que un caso particular del segundo (aquél en el que sólo se tiene información del colectivo en su conjunto, sin considerarlo individualmente), por lo que cualquier herramienta de finalidad globalizadora parece que debe basarse en la segunda opción. En esta línea se ha desarrollado el MEGA que permite elevaciones de todo tipo de encuestas cuantitativas (con uno o varios coeficientes de elevación y uno o varios métodos de agregación de casillas en caso de baja cobertura). La utilización del método antiguo (basado en multiplicadores) es factible con el MEGA como uno de los casos posibles que incorpora.

En concreto, en la operación de este año se ha optado por estimar el colectivo individualmente, completando las faltas de información del directorio con registros ficticios por casilla de elevación, utilizando los siguientes parámetros:

- Variables de estratificación: subrama de actividad y estrato de tamaño.

- Coeficiente de elevación (único): número de ocupados.

- Cobertura mínima: 8%.

Este nuevo método aplicado sobre el fichero de datos cuantitativos, ha permitido ofrecer, información sobre subzonas geográficas de la región y tratar de forma adecuada la falta de cobertura mínima en alguna casilla.

Tras el análisis de los resultados elevados, que fueron satisfactorios en su totalidad, se les dio el carácter de definitivos, generándose el fichero elevado de explotación de datos cuantitativos (que incorporaba variables derivadas).

El fichero de datos cualitativos no sufrió ningún proceso de elevación o manipulación posterior, puesto que, dada la naturaleza de esta información, se consideraban suficientes los indicadores basados en datos muestrales. De él se obtuvo el fichero de explotación de datos cualitativos, que también incorporaba variables derivadas, con el que se elaboraron las tablas finales.

Estos ficheros constituyen el colectivo final sobre el que se realizó la tabulación definitiva que se presenta en esta publicación, utilizando la herramienta informática denominada TABULA.

El diseño de la tabulación de resultados mantiene, como la totalidad de las fases del proceso, el criterio de unicidad aplicable a las encuestas de Actividad Económica; esto se traduce en la obtención de tablas tipo que permiten una perfecta comparabilidad de los resultados de los distintos sectores económicos.

1.8.4. Actualización del directorio de la encuesta

En el epígrafe se señalaron los principales pasos que se dieron hasta obtener el directorio final. Interesa aquí simplemente indicar, de forma algo más detallada, cómo se realizó la actualización del directorio inicial a partir de los datos obtenidos en la recogida de campo de la encuesta.

El principal elemento susceptible de aportar información para la puesta al día de directorios en operaciones de este tipo es la hoja de ruta, aunque también se obtiene información del cuestionario. Por lo tanto, la actualización del directorio se realiza en dos fases: la primera a partir de los datos de trabajo de campo y la segunda por medio de la información del fichero de resultados depurados.

La primera fase de la actualización es la más importante en términos cuantitativos debido a dos razones muy evidentes:

- La hoja de ruta ofrece información prácticamente para todos los campos del directorio (incidencias, cambios de denominación, dirección completa, identificadores, actividad principal, número de empleados, teléfono, etc.), tanto del establecimiento como de la empresa.

- Existe hoja de ruta para cada unidad de la muestra inicial mientras que sólo se dispone de cuestionario para las unidades que respondieron a la encuesta.

Por el contrario, el fichero de resultados finales depurados de la encuesta sólo permite actualizar la información de dos campos del directorio: actividad principal y número de empleados. Ahora bien, la calidad de esta información suele ser muy superior a la equivalente de la hoja de ruta, puesto que se solicita de forma más detallada y normalmente se cumplimenta con mayor cuidado por el informante. Por ello, los datos que resultan de esta fuente son prioritarios con respecto a los anteriores (si bien previamente se contrastan) y los sustituyen, en su caso, en el directorio final.

1.9. Conceptos económicos utilizados en la tabulación de resultados

A continuación se definen los principales conceptos económicos que aparecen en las tablas contenidas en los próximos capítulos junto con su formulación.

1- Establecimiento.

El termino establecimiento se define como toda unidad productora de bienes o servicios (oficina, fabrica, taller, cantera, etc...) ubicada en un emplazamiento físico definido. A efectos de este trabajo se considera establecimiento u oficina de servicios a empresas todo establecimiento cuya actividad principal se encuadre en alguna de las definidas en el epígrafe 1.4, es decir, aquellas que se encuadren en las divisiones 72, 73 y 74 de la CNAE-93.

2- Personal ocupado.

Es el conjunto de personas, ya sean fijas o eventuales, que en la fecha de referencia ejerzan funciones (remuneradas o no) en el establecimiento.

El termino personal ocupado esta referido a la media de cuatro fechas: 31 de marzo, 30 de junio, 31 de octubre y 31 de diciembre).

A efectos de tabulación se subdivide en:

- Personal fijo. Aquel que ejerce una labor de manera continua en la oficina o establecimiento y que a su vez se subdivide en:

. Personal no asalariado. Se incluyen propietarios, autónomos, socios activos y ayudas familiares siempre que no reciban remuneración fija y trabajen al menos un tercio de la jornada laboral.

. Personal asalariado. Incluye aquellos que reciben una remuneración determinada, normalmente establecida, por su trabajo.

- Personal eventual. Aquel que ejerce una labor con carácter eventual sin estar incluido en la nómina del personal fijo de la oficina o establecimiento.

Se debe tener en cuenta que no se incluye como personal ocupado aquel que, trabajando a comisión para la unidad, no dependa de la empresa (comisionistas), incluso aunque ejerza sus funciones preferentemente en el local en que se encuentra situado el establecimiento.

Por otra parte, el personal ocupado a 31 de diciembre, se subdivide complementariamente en función del área donde presta sus servicios y según el sexo. Se consideran las siguientes áreas:

- Dirección, gerencia y administración.

- Area comercial.

- Area de producción.

3- Horas trabajadas.

Son las horas realmente trabajadas, normales y extraordinarias, durante el año de referencia, por el personal ocupado. No se incluyen los días festivos, vacaciones y las horas no trabajadas por enfermedad, permiso, huelga, etc.. No tienen porqué coincidir con las firmadas por convenio laboral. Se subdividen en horas totales trabajadas por el personal no asalariado, asalariado fijo y asalariado eventual.

4- Total de ingresos y producción.

Recoge el total de ingresos corrientes, mayoritariamente de explotación, obtenidos por la unidad, que coincide con la suma de las siguientes partidas:

- Ventas e Ingresos por servicios. Recoge la facturación total en concepto de prestación de servicios, o de venta de bienes, si hubiese, disminuida por el montante de rappels fuera de factura (concedidos por volumen de pedidos) y devoluciones de ventas (remesas devueltas por clientes al no ajustarse a las condiciones de los pedidos). No incluye el IVA facturado o repercutido por estos conceptos.

- Trabajos para su inmovilizado. Los realizados por la empresa para si misma, utilizando sus equipos y su personal, que aumentan o mejoran el inmovilizado material o inmaterial de la empresa. En esencia no son un ingreso, sino mas bien, una disminución del gasto que, en otras circunstancias, debería contratarse externamente. A efectos macroeconómicos se contabilizan doblemente como un ingreso corriente (valorado a precio de coste por el gasto de material y personal utilizado) y como una inversión real de la empresa.

- Subvenciones corrientes de explotación. Son las transferencias corrientes, recibidas por la Administración Pública, Empresas privadas, particulares o instituciones, a fondo perdido, con el objeto de influir en el precio de los servicios prestados y productos fabricados o permitir una remuneración suficiente de los factores de producción.

- Otros ingresos de gestión. Son los obtenidos eventualmente por el establecimiento por prestación de servicios muy secundarios que no constituyen su actividad básica. Incluyen los ingresos de propiedad industrial cedida en explotación, los ingresos por arrendamientos y comisiones, los servicios prestados al personal propio y otros ingresos de gestión de carácter similar.

- Ingresos financieros. Rentas e intereses por las inversiones financieras realizadas por la empresa, préstamos otorgados, descuentos obtenidos por pronto pago y otro tipo de ingresos de carácter similar.

5- Variación anual de existencias.

Recoge las variaciones en almacén de existencias de ventas y compras de aprovisionamientos, materias primas y mercaderías para revender, si las hubiera. Para cada uno de los conceptos citados se pide el signo que determine si se trata de un incremento o disminución del valor de almacén en relación al ejercicio anterior al de referencia.

6- Total de compras y gastos corrientes.

Recoge el total de compras y gastos corrientes, a excepción de los impuestos, reflejados en las partidas de compras, servicios exteriores, gastos de personal, gastos finanacieros y dotaciones para amortizaciones.

7- Compras.

Incluye la compra de bienes inventariables corrientes necesarios para la producción o prestación de servicios propia del establecimiento. Se concretan en materias primas, compras en medios en la actividad publicitaria, combustibles, lubricantes, carburantes, elementos y conjuntos incorporables, materiales para consumo y reposición y materias auxiliares, envases y embalajes y mercaderías. También se recogen en este epígrafe las subcontratas. Todos estos conceptos vienen disminuidos por el montante de rappels fuera de factura y devoluciones de compras y sin incluir el IVA soportado correspondiente.

8- Servicios exteriores.

Servicios de naturaleza diversa adquiridos por el establecimiento. A efectos de esta tabulación se han subdividido en:

- Investigación y desarrollo: el importe de los trabajos en investigación y desarrollo realizados por terceros a través de contratación exterior.

- Arrendamientos y canones: gastos por el alquiler de bienes muebles (maquinaria, equipo, vehículos) e inmuebles y canones, patentes y concesiones en uso o a disposición de la unidad.

- Reparaciones y conservación: gastos de mantenimiento, reparación y conservación de los elementos de inmovilizado material en uso o propiedad de la unidad. No se incluyen las grandes reparaciones del inmovilizado consideradas como inversión.

- Comisiones: remuneración a agentes mediadores externos como contraprestación a los servicios que prestan a la unidad.

- Informática: gastos exteriores por servicios informáticos, ya se refieran al asesoramiento exterior, a desarrollo o compra de software o a otro servicio informático externo (grabación, calculo, etc..). No incluye la compra de material informático ni de equipos o periféricos de tratamiento electrónico de la información.

- Otros servicios profesionales: recoge los gastos exteriores en concepto de asistencia jurídica, contable, asesoramiento fiscal, gestión tributaria y auditoría, servicios de gestión administrativa, asesoramiento en estrategia empresarial y financiera, servicios técnicos, y otros servicios de naturaleza similar.

- Transporte por terceros: Incluye el transporte de material tanto de compras como de ventas.

- Primas de seguros no sociales: cantidades satisfechas en concepto de primas de seguros de carácter no social, como pueden ser: incendio, robo, multiriesgo, transporte, riesgos financieros, etc.

- Servicios bancarios y similares: recoge las cantidades satisfechas en concepto de servicios bancarios y similares que no tienen la consideración de gastos financieros.

- Publicidad y estudios de mercado: gastos por estos conceptos cuando se realizan externamente a través de contratación exterior.

- Suministros de electricidad, agua y gas: suministros en estos conceptos que no tienen la cualidad de almacenables.

- Comunicaciones: recoge los gastos de teléfono, fax, correos y telégrafos, mensajería, télex y otros similares.

- Otros servicios exteriores: gastos de traslado del personal a su centro o lugar de trabajo y aquellos viajes y dietas originados por la actividad propia del establecimiento, gastos de material de oficina y escritorio y de reposición de material fungible para equipo de oficina, gastos de formación de personal, gastos de imprenta, edición y suscripciones, tasas no fiscales de la Administración, limpieza de edificios y locales, seguridad y otros servicios de naturaleza similar.

9- Gastos de personal.

Incluye los pagos realizados por el establecimiento a su personal por todos los conceptos, ya sean sueldos y salarios, prestaciones, cotizaciones y demás cargas sociales pagadas directamente por las empresas e imputables a dicho personal. Se subdivide en:

- Sueldos y salarios brutos: comprende todo tipo de remuneraciones satisfechas a los asalariados del establecimiento, esto es, el salario base y complementos, pagas extras, pagas de beneficios, pagas en especie, etc., la cantidad retenida por el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y las cuotas a la Seguridad Social y a sus organismos que corren a cargo de los trabajadores.

- Indemnizaciones al personal: cantidades que se entregan al personal del establecimiento para resarcir un daño o perjuicio como es el caso de despido y jubilaciones anticipadas.

- Cotizaciones sociales a cargo de la empresa: comprende las cargas sociales de la empresa a favor de los organismos de la Seguridad Social y las aportaciones devengadas a planes de pensiones y otro sistema análogo de cobertura de situaciones de jubilación, invalidez o muerte, en relación con el personal del establecimiento.

- Otros seguros sociales: gastos de naturaleza social a favor de entidades de previsión social, aseguradoras o similares en relación con el personal de la unidad.

- Otros gastos de personal: otros gastos de naturaleza social realizados en cumplimiento de una disposición legal o voluntariamente por la empresa como las becas, ayudas para comedores, economatos, guarderías, colegios, instalaciones deportivas y otros servicios similares y prestaciones pagadas directamente sustituyendo o complementando las de los organismos aseguradores en casos de jubilación, enfermedad, etc.., en relación con el personal del establecimiento.

10- Gastos financieros.

Recoge los costes de financiación externa del establecimiento en concepto de intereses de deudas y obligaciones, intereses por descuento de letras y similares, descuentos sobre ventas por pronto pago y otros gastos financieros de naturaleza similar. No incluye las comisiones y servicios bancarios.

11- Dotaciones para amortizaciones.

Representa la depreciación experimentada en el ejercicio por el inmovilizado inmaterial y material por su aplicación al proceso productivo y la cuota del ejercicio que corresponde por amortización de gastos de establecimiento.

12- I.V.A. repercutido corriente.

Es el impuesto sobre el Valor Añadido que el productor o suministrador de servicios repercute a sus clientes sobre sus ventas. También se denomina IVA facturado o devengado. No incluye el IVA repercutido en la venta de bienes usados del inmovilizado material.

13- I.V.A. repercutido por ventas de inmovilizado material.

Es el impuesto sobre el Valor Añadido repercutido en la venta marginal de bienes usados del inmovilizado material del establecimiento.

14- I.V.A. soportado deducible corriente.

Es el impuesto sobre el Valor Añadido que es soportado por la adquisición de bienes y servicios corrientes utilizados por la unidad en su proceso de producción y que es fiscalmente deducible. No incluye el IVA soportado deducible por inversiones.

15- I.V.A. soportado deducible por adquisición de bienes de capital.

Es el impuesto sobre el Valor Añadido que es soportado por la adquisición de bienes de capital o la realización de grandes reparaciones y mejoras del inmovilizado material, y que es deducible a efectos fiscales.

16- Impuestos especiales.

Impuestos que graban el valor de ciertos bienes producidos como los alcoholes y bebidas derivadas, tabaco, hidrocarburos y otros análogos. Este sector no esta afectado por ningún impuesto de este tipo.

17- Otros impuestos ligados a la producción.

Comprende el Impuesto sobre Actividades Económicas, la Licencia de Apertura, la Tasa de Circulación de Vehículos de uso del establecimiento y otros impuestos ligados a la actividad de tipo indirecto. No incluye el IVA ni los impuestos que graban la renta o el patrimonio.

18- Inversión bruta (sin I.V.A.).

Comprende el conjunto de bienes duraderos de capital fijo (bienes de cierto valor, adquiridos con el fin de utilizarlos durante más de un período en el proceso de producción y que se contabilizan en la unidad como inmovilizado material) adquiridos en el ejercicio. Incluye también las cuotas de leasing financiero y el valor de los servicios incorporados a estos bienes. Se valora excluyendo el IVA soportado deducible por estos conceptos. Se subdivide en:

- Compras de inmovilizado material: incluye las adquisiciones de terrenos y bienes naturales, edificios y locales, instalaciones técnicas completas, equipos para proceso de información, maquinaria y utillaje, mobiliario y equipo de oficina, elementos de transporte y otro inmovilizado material.

- Grandes reparaciones de inmovilizado material: valor de los gastos realizados en el ejercicio para grandes reparaciones o mejoras de cualquier elemento de inmovilizado material, por terceros. No se incluyen las grandes reparaciones realizadas por la propia unidad para sí misma utilizando sus equipos y su personal (trabajos para su inmovilizado) ni los gastos de conservación y reparación corrientes.

- Trabajos para su inmovilizado material: concepto descrito en el punto cuatro de este epígrafe.

19- Ventas de inmovilizado material.

Valor de la enajenación o venta en el ejercicio de bienes de capital propio incluidos en el inmovilizado material de la unidad. Tales son las ventas de inmuebles o locales y de maquinaria y equipo de toda clase. Aparece valorado sin el valor del IVA repercutido sobre dichas ventas.

20- Inversión realizada (sin IVA) (18-19).

Es la diferencia entre la inversión bruta, sin IVA, y las ventas de inmovilizado material. Representa la formación bruta de capital fijo realizada por la unidad valorada sin IVA, de acuerdo al sistema de valoración neto del S.E.C. (Sistema Europeo de Cuentas Económicas Integradas).

21- Saldo de I.V.A. de capital (15-13).

Corresponde a la diferencia entre el IVA soportado deducible sobre inversiones y el IVA repercutido sobre ventas de capital. Representa aproximadamente la deuda contraída por la Hacienda frente al establecimiento por sus operaciones de capital respecto al Impuesto sobre el Valor Añadido.

22- Subvenciones de capital.

Son las transferencias recibidas de la Administración Pública u organismos privados con la finalidad de financiar total o parcialmente proyectos de inversión.

23- Producción a salida de fábrica (registro bruto).

Es el resultado de la actividad global productora de bienes y servicios del establecimiento. A diferencia del total de ingresos corrientes, sólo recoge aquellos ingresos relacionados con la producción de la unidad, en concreto: ventas de productos transformados, ingresos netos por reventa, prestación de servicios, trabajos para su inmovilizado, otros ingresos de gestión no contemplados, variación de existencias de ventas e impuestos especiales, disminuidos en su caso por el valor de los rappels y devoluciones de ventas. Está valorada a salida de fábrica en términos de registro bruto, es decir, incluyendo el IVA y los impuestos que graban la actividad productiva y excluyendo las subvenciones. A efectos de la tabulación se subdivide en las partidas señaladas más el Impuesto sobre el Valor Añadido repercutido por dichos conceptos (IVA repercutido corriente).

24- Consumos intermedios (registro bruto).

Representa el valor de todos los bienes, excepto los de capital fijo, y servicios consumidos en el proceso de producción. La valoración en términos de registro bruto indica que está incluido el IVA soportado deducible que recae sobre estos bienes y servicios. A efectos de la tabulación se ha subdividido en: consumo de materiales, servicios exteriores e IVA soportado deducible corriente.

25- Valor añadido bruto a salida de fábrica (registro bruto) (23-24).

Es la diferencia entre el valor de producción a salida de fábrica registro bruto y los consumos intermedios registro bruto. Representa el valor nuevo creado en el proceso productivo por el establecimiento.

26- Saldo de IVA corriente (12-14).

Corresponde a la diferencia entre el valor del IVA repercutido corriente y el IVA soportado deducible corriente. Representa aproximadamente la deuda que contrae el establecimiento frente a la Hacienda en cuanto a sus operaciones corrientes respecto al Impuesto sobre el Valor Añadido.

27- Valor añadido bruto a salida de fábrica (sin IVA) (25-26).

Es el valor añadido bruto a salida de fábrica sin el IVA correspondiente. Se corresponde con la valoración del sistema Europeo de Cuentas Económicas Integradas (S.E.C.) conocida como salida de fábrica en términos netos, que es la aconsejada para las comparaciones internacionales.

28- Valor añadido bruto a coste de los factores.

Es una tercera forma de valorar el valor añadido bruto, esta vez descontando del valor añadido bruto a salida de fábrica sin IVA, el valor de los otros impuestos ligados a la actividad y sumando las subvenciones de explotación. Se intenta eliminar los efectos originados por la actuación de las administraciones públicas sobre el proceso productivo. Representa la aportación o el coste de los factores de producción (trabajo y capital) al proceso productivo.

29- Excedente bruto de explotación (28-9).

Diferencia entre el valor añadido bruto al coste de los factores y el coste de personal. Indica el excedente obtenido por la unidad una vez deducidos los gastos directos de explotación (entre los que no se consideran los financieros), pero no se corresponde con el denominado beneficio empresarial ni a la diferencia entre el total de ingresos y gastos corrientes.

30- Coeficientes analíticos.

Constituyen características derivadas calculadas por cociente entre las variables más significativas. Se han elegido aquellas que son de uso más habitual en el sector y en el análisis macroeconómico para facilitar la tarea al lector analista.



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