Instrument 3: cage sculpture

"Son payasos modernos, apartados y, sin embargo, impulsados hacia un movimiento que se hace cada vez más dramático. Una energía excesiva, intensa, contenida por la descarga nerviosa del cuerpo. Las cabezas se mueven con un ritmo mecánico, rápido. Las manos se abren y los dedos se estiran hasta el extremo, los pies golpean y repiquetean, los cueros se comban y se retuercen".

- Francesca Pedroni, Il manifesto

 

Instrument 3: cage sculpture - The unbearable heaviness of being es la tercera parte del proyecto Instruments, a través del cual Roberto Zappalà, explora el cuerpo en relación con el sonido, el ruido y la música. Con la colaboración de los músicos que participan en la producción de este mismo proyecto, el coreógrafo ha llevado a cabo una interesante investigación sobre algunos instrumentos poco habituales: después del "marranzano" (arpa de boca) tradicional siciliano en Instrument 1 y del hang en Instrument 2, con Instrument 3 Zappalà se dedica a los tambores hechos a mano del extraordinario músico Alfio Antico.

Una enfermedad actual. Paranoia.
¿Podría esta palabra resumir la condición de la sociedad occidental de hoy?
¿Es el siglo XXI la edad de la paranoia?
Puede ser. Tal vez ya no somos capaces de definir la realidad que tenemos más cerca sin utilizar el filtro de la paranoia, un filtro capaz de alterar la realidad y de desgajarnos de toda responsabilidad personal. Si creemos que hay gente ahí fuera que puede hacernos daño, podemos limitarnos a echarles la culpa.
Paranoia. Por seria, irrelevante, patológica o transitoria que pueda parecer, es como una alfombra gigantesca bajo la cual pueden esconderse todas las cosas que no funcionan o que, simplemente, no van en la dirección en la que se supone que deberían ir. Una alfombra tan grande que no nos sería difícil escondernos debajo.
La paranoia es el gusano de la carcoma, que se abre camino a bocados hacia nuestro interior, deteriora la tela de araña que constituye nuestra existencia, la que tan laboriosamente hemos construido día tras día, hasta un punto irreparable. Nello Calabrò

'Los paranoicos son como los poetas. Nacen así'. J. A. Fieschi 1980

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