Danza contemporánea
Hacednos, si queréis, enemigos de todas las naciones, pero apartad de nosotros la guerra civil… ¡Tan miserable es salir vencedor de una guerra civil!
El cordobés Marco Anneo Lucano (39-65 d. C.), nieto de Séneca, escribió esta sentencia en la única obra que de él ha sobrevivido hasta hoy, la Pharsalia o Bellum Civile, un poema épico inacabado en diez cantos sobre la guerra civil entre Julio César y Pompeyo Magno que ha generado, por su compleja vitalidad, múltiples críticas, significados e interpretaciones a lo largo de la historia. Pero su vigencia hoy destila un claro mensaje de invocación a la libertad y de rechazo a la tiranía. En su relato, solo es heroica la resistencia y su lamento proclama una queja que llega a alcanzar un carácter universal.
Tomando como punto de partida la Pharsalia de Lucano, este trabajo coreográfico indaga en el concepto de guerra desde un enfoque alegórico, poniendo el cuerpo al servicio de conceptos cotidianos como el conflicto, la crisis, la resistencia, la tensión o la evasión. Pero el ser humano no se conforma con su estado de guerra, y es ahí, cuando aparecen en escena los vestigios de la belleza, de nuestra esperanza.
Con una propuesta escénica y de vestuario contundente y una creación musical original que viaja entre lo épico y lo electrónico, los 11 intérpretes, transitan coreografías cargadas de violencia, sutileza y teatralidad lanzándose, con toda su fisicidad, a una fiesta del combate. Cuerpos en guerra que evocan paisajes de una belleza extraña y a la vez cautivante.
Antonio Ruz es un referente consolidado en la danza contemporánea, con un discurso coreográfico que se nutre de referencias artísticas heterogéneas. Nacido en 1976 en Córdoba, en 1992 consigue una beca para formarse en la Escuela de Víctor Ullate de Madrid. En 2001 aterriza en el Ballet del Gran Teatro de Ginebra y estrena sus primeras obras como coreógrafo. Su etapa en el extranjero se consolida en el Ballet de la Ópera de Lyon. En 2006 regresa a España a la Compañía Nacional de Danza. En la búsqueda de su propio universo creativo destaca especialmente su relación con la prestigiosa coreógrafa Sasha Waltz. En 2009 crea su propia compañía y desarrolla un diálogo multidisciplinar en sus producciones: Recreo.02, 2015, para la inauguración del nuevo Colegio Alemán de Madrid, y Transmutación, 2018, instalación coreográfica en el Museo Universidad de Navarra. Sus obras atraviesan formatos muy diversos, entre los que se encuentra el gran ballet argumental Electra (2017), la zarzuela El barberillo de Lavapiés (2019) y el ballet La noche de San Juan (2021). En 2021 regresa a la Compañía Nacional de Danza en calidad de coreógrafo, crea In paradisum y dirige Aún, su primera película de danza.