Flamenco contemporáneo
En una escena vacía in media res, alguien despliega relatos que nacen unos dentro de otros: una bailaora en el Hades, Cupido en las Cruces de Mayo o Medea desplumando una gallina habitan un tiempo anacrónico. Nuestro personaje cuenta y, al hacerlo, induce al sueño. No obstante, justo antes de acabar el relato, una señal hace que la historia continúe, que otro cuento sea narrado sosteniendo así el hilo de la noche. Como para nuestro personaje, para el artista hay siempre un público al que entretener. Y ser esclavo de la propia creatividad se convierte en una forma de liberación. Una parábola abierta que quiebra la distancia entre actor y audiencia. Al final, queda solo el eco de una pregunta suspendida en el aire: ¿estás ahí?
Fragmentos de la noche es un proyecto de Sara Jiménez en el que la bailaora —como en Ave de plata o Adioses— explora el imaginario mitológico a través del flamenco y la danza contemporánea. En este cruce, el cuerpo explora nuevas formas de expresión y de pensamiento, descubriendo reflexiones íntimas sobre el papel del artista como actor en un teatro en el que se confunde espectáculo y realidad.
Bailarina y coreógrafa nacida en Granada, Sara Jiménez es titulada por el Conservatorio Profesional de Danza Reina Sofía de Granada en la modalidad de danza española y flamenco, y becada por el Centro Andaluz de Danza de Sevilla bajo la dirección de Blanca Li. Entre sus obras como coreógrafa se encuentran Fandango18, Saldiguera, Vía Bamba, Tápate niña, [ETC], VARIACIÓN a tempo, Recital flamenco y Real de la Alhambra. Además de su trabajo en solitario, ha participado como bailarina solista con Estévez & Paños, el Ballet Flamenco de Andalucía, Eduardo Guerrero, Daniel Doña y WangRamirez, entre otros. En 2022 comenzó una nueva andadura como Sara Jiménez en Compañía y su ópera prima Adioses, a la que le siguen Musa mía y Ave de plata. Sara Jiménez va trazando un estilo propio en el que la danza, el gesto dramático y la música conviven en un único lugar. Firme creyente de las colaboraciones artísticas y la creación colectiva, se abre al discurso de cada uno de los componentes que invita, en una búsqueda de ese lugar donde convergen las diferentes disciplinas artísticas que inspiran sus obras. La crítica ha afirmado que “Sara Jiménez convierte su cuerpo en el mecanismo perfecto de la expresión de la alegría, el dolor y el infinito amor al arte de la danza”.