David Vaamonde
Una hoja de papel blanco, un pincel y un poco de tinta china son los elementos que he utilizado en esta serie para acercarme al Flamenco de una forma directa y sincera, sin querer imitar a nadie.
Como artista plástico siempre me identifiqué con el Flamenco: lo representé a través de la escultura y la pintura con el propósito de innovar constantemente sin alejarme de la verdad.
En esta serie de dibujos, realizada sobre 20 hojas de 60 x 40 cm, me propongo simplemente representar el Flamenco sin explicar qué o a quién represento. Sin títulos y sin nombres. Simplemente escucho música y me dejo llevar por mis sensaciones. La libertad tiene un papel fundamental en este concepto.
Se puede apreciar la MUJER como tema esencial en casi todas las obras. Los PIES y los ZAPATOS también aparecen, pero lo que llama mucho la atención son las GOTAS.
GOTAS de sudor fruto del esfuerzo, o quizás de sangre, no lo sé. EL LUNAR, aunque sea un tópico, me recuerda la luna llena y no dudo en utilizarlo. Las MANOS, que casi siempre están deformadas, expresan un sentimiento que no se asocia siempre a la belleza, pero sí al equilibrio.
No hay color, simplemente el negro sobre el blanco que marca con fuerza mi recorrido por la hoja.
No busco la belleza: busco la verdad que no se ve, pero sin embargo puedo representar.
Mis personajes son el Flamenco, son seres que me gustaría encontrar o escuchar. Emanan de un mundo interior que se ha fraguado en la observación.
Una obra sin duda para ver en familia.
David Vaamonde