Sinopsis. LA TATI-Bailaora de Madrid

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Ahí está, ahí está, más chula que la Puerta de Alcalá, La Tati, la bailaora de la capital, un prodigio de la naturaleza flamenca, castiza y cabal como ella sola, que merece un trono por haber sabido llegar y mantenerse juncal, y la Suma Flamenca se lo da en forma de este Homenaje Flamenco al que acuden en acto de reconocimiento sus compañeros, como ella, máximas figuras de cartel, donde encontramos a lo más granado de ese Jerez que adora y que la quiere, una tierra cuyo arte bulearero hizo suyo. Y así, por bulerías, deslumbró al mismísimo Manolo Caracol, que la tuvo como predilecta en su tablao Canasteros. En el Rastro se puso en danza al son de La Quica y con doce años debutó en el tablao más genuino, Zambra, antes de pasar a Torres Bermejas. Recorrerá Europa con el Festival Flamenco Gitano, será invitada del BNE y forma su compañía para recorrer el mundo en "Apología flamenca", haciendo creíble a una Bernarda Alba o una Madre Coraje. Un portento artístico, una didacta necesaria, insustituible, una grande esta Francisca Sadornil Ruiz, ese poderío que llaman La Tati y ahí está, ante ustedes. Un aplauso.

José Manuel Gamboa

Sobre la artista

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Francisca Sadornil Ruiz nació en el 104 de la calle de Toledo de Madrid. Criada en el Rastro, donde sus padres tenían un puesto de compra y venta, se puede decir que ya traía consigo esa herencia misteriosa, aunque telúrica –que no consta en el ADN–, de los seres marcados por un destino implacable y conducido por una vocación profunda e irreversible. Tal vez la imaginacion que añora y que juega con el arco iris de la danza nos hace tener siempre presente a La Tati bailando a través de los tiempos, como si de ella recordar otra cosa fuera una falacia propia de quien no tiene sentido en sus carnes el ungüento remediador y la llamarada voraz de su presencia como bruja danzante.

A los seis años de sus primeros pasos en la academia de la Quica, bailaora sevillana, en la plaza de Vara del Rey, 5, en pleno Rastro, donde acudía La Tati de mirona y oyente a las clases que impartía La Quica a cambio de multiples faenas que realizó, ya que le resultó imposible hacerlo condinero. Nunca recibió enseñanza directa. Las dos sillas que forman su camaen este local ya han sido retiradas contra la pared, pues el dosel del arte con que nació la acompaña como una sombra pegada a su figura errante por los madriles.

A los doce años debuta como solista en el tablao Zambra, en el mismo mítico escenario donde actuaron las grandes figuras Rosa Durán, Manolo Vargas, Rafael Romero "El Gallina", Pericón de Cádiz, Juan Varea, etc, y allí se va formando artísticamente. Posteriormente pasa al tablao Torres Bermejas, compartiendo escenario, durante tres años, con el Niño Ricardo, Fernanda y Bernarda de Utrera, La Paquera de Jerez, el Gran Faíco, Mario Maya, El Güito y Trini España.

La intensa experiencia le da ocasión de iniciar su primera gira por Europa en la compañía Festival Flamenco Gitano de Liman & Rau, que aglutina a los mejores artistas del jazz y del flamenco: Ella Fitzgerald, Duke Ellington, Ray Charles, Paco de Lucía, Paco Cepero, José Menese, Juan Peña El Lebrijano, El Güito y la Singla, permaneciendo en esta compañía tres años consecutivos.

Vuelve a Madrid a los tablaos más prestigiosos. Inauguración Los Cabales, del bailarín y coreógrafo Luisillo. Actúa diversamente en Torres Bermejas; El Duende, de Gitanillo de Triana, dirigido por la mítica Pastora Imperio; y en Los Canasteros, de Manolo Caracol, de quien era su artista preferido en el baile por bulería. Allí compartió escenarios con la más genuina generación flamenca: la de Terremoto de Jerez, Manuel Soto Sordera, El Sernita, Manolo Caracol, Camarón de la Isla, Matilde Coral o Cristina Hoyos.

Graba dos discos para la casa Philips con el Festival Flamenco Gitano y es contratada por la Compañía de teatro danza de Luisillo, en calidad de artista invitada y con la que participa en giras por Sudáfrica y Asia (1971), y posteriormente por Australia y Nueva Zelanda.

Entre 1973 y 1974 transcurre una larga temporada en la capital de Venezuela, Caracas, donde graba dos programas para televisión en Canal 8, con dirección de Remy Otolina, por los que es galardonada con el premio Guaicapuro de Oro (premio que comparte con Olga Guillot, Raphael y LolaFlores).

Graba para TV Marsella (Francia) un programa interpretando al baile el papel protagonista de Antoñito el Camborio, del poemario Romancero Gitano, de Federico García Lorca. En Televisión Española interviene en los programas Rito y geografía del baile (dirigido por Fernando Quiñones), La danza, La buena música de los flamencos (1988), Arte y artistas del flamenco (dirigida por Romualdo Molina, en tres programas en 1990) y Algo más que flamenco (1998).

Participa en grandes festivales y escenarios andaluces como La Parpuja (Chiclana), El Potaje de Utrera, la Fiesta de la Bulería (Jerez de la Frontera), La Cata de Montilla (Córdoba), el Teatro José María Pemán, dentro del Festival de Cádiz, el Homenaje a la Perla en el Teatro del Parque (Cádiz), Las Colombianas (Huelva), el Festival de los Gitanos en el Teatro Lope de Vega, el Festival de Triana Pasando el Puente (Sevilla) y la Fiesta de la Bulería (Algeciras).

En 1983 es ​​requerida por Cumbre flamenca, auspiciada por el Ministerio de Educación y Cultura, para los festivales de Melilla y Ceuta.

En 1984 y 1985 actúa en el Teatro Alcalá Palace de Madrid.

En 1986 se forma la Cumbre flamenca del baile, con Carmen Cortés, Gerardo Núñez, La Tolea, Manolete, Cristóbal Reyes y La Tati. A ellos se suma posteriormente Antonio Canales y estrenan en el Festival Latino de Nueva York. También actúa en el Festival de Kopiu (Finlandia), en el Magreb y en el Teatro París de Francia.

En 1987 participa en el Día Internacional de la Mujer celebrado en el colegio mayor San Juan Evangelista de Madrid. Lo hace con su propio grupo e introduce por primera vez instrumentos heterodoxos para el flamenco, como el violín, la flauta o el bajo.

Ofrece un concierto en el Círculo de Bellas Artes, del que escribe en El País el flamencólogo y crítico de flamenco Ángel Álvarez Caballero. Refiriéndose a La Tati dice: "Bailaora de Madrid. Nunca Madrid ha tenido que yo recuerde una tan grande bailaora como La Tati. Talento polivalente, personalísimo, fuera de posibles comparaciones. La Tati es distinta a cualquier otra bailaora. Lo dicho: una bailaora distinta".

Estrena Madrid ama flamenco en Los Veranos de la Villa de Madrid durante dos temporadas consecutivas.

En 1998 estrena Apología flamenca en el Sodra Teatro de Estocolmo. Este espectáculo lo representa en dos ocasiones en París, compartiendo cartel con Camarón de la Isla en el Cirque d'Hiver. Además lo baila en elFiesta del Corpus de Granada.

En 1989 participa en la V Bienal de Arte Flamenco de Sevilla y danza Noche de bailaoras en el Centro Cultural de la Villa de Madrid. Un año después mantiene dos meses en cartel Apología flamenca en el Teatro Mogador de París y actúa en el Festival Internacional de las Artes de Bruselas y en el Festival de Danza de Florencia, en Italia. En Madrid representa Apología flamenca, presentando en su compañía al joven Joaquín Cortés como artista invitado.

Lleva el espectáculo Chambao flamenco a la capital mexicana, a Monterrey, Guadalajara y Acapulco, y en 1991, en el Festival Cervantino de Guanajuato (México) obtiene el premio al mejor espectáculo con Apología flamenca.

Entre 1992 y 1993 actúa en Suecia, Noruega, Finlandia, Laponia, adonde llega por primera vez una compañía flamenca, Oporto y Holanda.

En 1994 inaugura el Gran Casino de Niza junto a la gran cantante Ute Lumper y estrena Herejía de la llama (obra dramático–musical) de Luis Pérez Palacios, en el Teatro Madrid, dirigida por Antonio Llopis Gallardo. En ella incorpora textos, actores e instrumentaciones de teclados, bajo, saxo, flauta, bantú, etc. Participa en el Festival Internacional de El Pireo (Grecia), el Festival de Danza de Salónica (Grecia) y el Festival de Mastrich (Holanda).

Entre 1995 y 1996 baila Recital flamenco junto a José Mercé y actúa en Los Veranos de la Villa, el Cuartel del Conde Duque, el Festival de Música y Danza de Santander, el Festival Internacional de la Guitarra (Jerusalén) como directora y coreógrafa, con artistas de Israel y España en Tel-Aviv y Jerusalén.

En 1997 produce y dirige Madrí-Jeré para el II Encuentro Flamenco Centro Cultural de la Villa de Madrid, reuniendo por primera vez cantaores de la categoría de Capullo de Jerez, Fernando de la Morena, Juan Moneo El Torta, El Mijita, y a guitarristas como Juan Parilla, Manuel Parrilla (hijo), Periquín Jero, Diego Amaya, Andrés Heredia y David Amaya.

En 1998 actúa durante cinco semanas, como bailaora y coreógrafa, en el Teatro Sanders Well de Londres con Campanas flamencas, de Francisco Sánchez. Posteriormente es nombrada directora adjunta de la compañía. Ese año interviene en el Festival Palau de la Música de Valencia y en la Sala Mozart del Auditorio de Zaragoza.

En 1999 participa en el Festival de Sydney (Australia) con Campanas flamencas, en el Festival Flamenco de Madrid, en un díadedicado a los grandes artistas de la capital de España, en el Gran Teatrode Cáceres con Madrí–Jeré, que también representa en el Centro Cultural de la Villa de Madrid, y estreno para The World Financial Centerde Nueva York el espectáculo flamenco Relumbre rojo sobre morado.

A la altura del nuevo siglo la evolución artística de Francisca Sadornil "La Tati" ha ido ganando terreno teatral sin menoscabo de su jondura. Este proceso dialéctico encontró su punto culminante al encontrar la obra La casa de Bernarda Alba, de Lorca. De inmediato surgió la ilusión de abordar un proyecto común: el teatro en el flamenco o el flamenco en el teatro, ya que la importancia de ambas disciplinas deben crecer en base a su complementaria. Se forma la compañía con el nombre genérico La Tati Compañía Teatro Flamenco, donde se encuentran la voz, la danza y la música. La Tati Productions S.L. se encargó de producir la obra con ayuda de la Comunidad de Madrid y la bailaora se encargó de la coreografía, la dirección artística y la asesoría musical. El estreno de La casa de Bernarda Alba tuvo lugar en el Auditorio de Las Rozas dentro del Festival de Otoño. Posteriormente se representó en el V Festival de Jerez, el Teatro Jovellanos (Gijón), el Teatro Juan Bravo (Segovia), el Teatro Emperador (León), el Teatro Juan de Encina (Salamanca) y el Teatro Cervantes (Málaga). La obra estuvo en cartel hasta el 2002.

Otro de los descubrimientos de La Tati fue el teatro de Bertold Brecht en la librería del teatro de Salamanca donde representaba La casa de Bernarda Alba. Inmediatamente se interesa por suproducción teatral épica, y en particular le impacta Madre coraje,que lee con avidez. Al terminar la lectura exclama: "A esta madre solo le falta bailar". Durante meses sigue leyendo y meditando sobre la idea de la madre en Gorky, Lorca, Miguel Hernández, hasta plasmar su propia visión en Madre.

A diferencia de La casa de Bernarda Alba, en Madre los textos que narran la historia son cantados y bailados en los más puros estilos flamencos: tonás, siguiriyas, soleares, taranta y taranto, bamberas, bulerías, tangos..., incluyendo instrumentos heterodoxos en el flamenco, como el violín, la flauta, la percusión y música grabada. En Madre el teatro flamenco de La Tati se convierte en ópera flamenca.

En enero de 2003, Festival de Teatro el Wereld Muziek, uno de los más prestigiosos de la Europa del norte, se pone en contacto con La Tati para acordar la coproducción y el estreno mundial de Madre.

El festival programa cada dos años seis estrenos mundiales de música, teatro y danza de raíz étnica en Holanda, Alemania y Bélgica. Madre se estrena el día 1 de abril de 2004 en Utrecht y gira por Holanda y Bélgica hasta el 19 de abril, y presentándose, con gran éxito depúblico y crítica, en los siguientes teatros: el Stadsschouwburg (Utrecht), el Zuiderpershuis (Amberes), el Roterdamse Schouwburg (Rotterdam), el De Dos/Cultureel Centrum (Hasselt), el Stadsschouwburg (Eindhoven), el DeMervaart (Ámsterdam), el Theatre Aan Het Vrijthof (Maastricht), el Chassé Theatre (Breda), el Leidse Schouwburg (Leiden), el Theatre Zwembad de Regentes (Den Haag) y el Theatre De Mytre (Goes).

En 2016 presenta su espectáculo A mi manera, en el Teatro Conde Duque de Madrid, dentro del ciclo Flamenco Joven.

En 2017 presenta Las dos orillas con motivo del trigésimo aniversario de la emblemática Casa Patas de Madrid. El montaje plantea un punto de encuentro entre occidente y oriente al incluir la música interpretada con laúd y el canto egipcio.

Como maestra y coreógrafa, La Tati ha sido invitada por el Ballet Nacional de España durante la dirección de Antonio Ruiz Soler, por el Ballet Hispánico de Nueva York, el Teatro Bellas Artes de México DF, la Universidad de Alburquerque de Nuevo México y la Spanish Dance School de Londres.

Además ha impartido clases magistrales y cursos sobre flamenco en lugarescomo la Universidad de George Washington, Toronto (Canadá), Italia, Alemania, Israel, Francia… y en el Centro Amor de Dios de Madrid, donde lleva veinticinco años creando su propia escuela.

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