“En Kansas hay que andar con zapatos de plomo porque en cualquier momento puede venir un tornado. Y si no tienes peso en los pies el viento puede llevarte como si fuera una hoja seca. Es muy importante tener peso en los pies para estar con los pies en la tierra. Pero a veces es necesario quitarse los zapatos de plomo y dejarse llevar por las alas del viento. Esta es la historia de Dorothy y de cómo un tornado se la llevó lejos de Kansas, más allá del arcoíris, allí donde la imaginación emprende su mágico vuelo.”
Desde su primera publicación en 1900, El Mago de Oz ha tenido numerosas adaptaciones cinematográficas, teatrales y musicales. En esta versión, La Canica Teatro de Títeres se ha propuesto contar el viaje que realizan los cuatro amigos para conseguir sus deseos valiéndose de variados recursos escénicos con el objetivo de conseguir la máxima expresividad.
Sobre una mesa, dos actrices titiriteras dan vida y alma a diversos objetos cotidianos. Una escoba se transforma en un espantapájaros que quiere tener un cerebro para poder pensar; una fregona se convierte en un león cobarde que anhela ser valiente; un rallador y una tetera, en el hombre de hojalata que quiere tener un corazón para poder sentir; una tacita con una bolita en Dorothy, una niña que desea volver a su casa en Kansas. Todo es posible en el país de Oz, donde todo es magia, poesía e ilusión.”
(Descripción literal sobre el espectáculo de su director y creador, Pablo Vergne)
La Canica, con sede en Madrid, fue creada en 2005 por Eva Soriano (actriz, artista plástica y directora de arte) con el objetivo de crear espectáculos multidisciplinares dirigidos al público infantil, con el títere y el objeto como base de los trabajos. Pablo Vergne, argentino afincado en Madrid, es el responsable de la dirección escénica de las obras. Especializado en espectáculos de títeres para público infantil y familiar, es una figura consolidada de nuestro teatro titiritero, fundador de la compañía El Retablo y colaborador habitual de otras compañías. Su trabajo destaca por la sencillez y claridad con que logra acercarse a la psicología infantil, captando con humor y delicadeza la manera en que los niños ven y sienten el mundo que los rodea. Colaboran con ellos otros profesionales provenientes de distintas ramas artísticas (teatro, danza, artes plásticas, música…). La Canica pone un especial acento en la exploración de materiales y en la interpretación. Casi todas sus obras (nueve hasta el momento) han sido muy premiadas, teniendo en su haber, entre otros, varias categorías de los premios Feten y de la Fira de Titelles de Lleida. Su última participación en Teatralia tuvo lugar en la edición de 2022 con Chinchulina y el Ruiseñor de la China. Anteriormente, han presentado en el festival: El gallo de las veletas (2014), Historia de un calcetín (2018) y Orfeo y Eurídice (2019).