Para crear Pourquoi pas! (¡Por qué no!), Alain Moreau ha seguido el mismo proceso de creación que caracteriza todos sus trabajos: a partir de una primera idea, poco a poco construye una historia embrionaria, una escenografía, unas marionetas. Otros miembros del equipo le expresan preocupaciones, preguntas y otras ideas, que van tomando forma a través de un trabajo dramatúrgico muy preciso que posibilita la comprensión de la historia sin utilizar la palabra. Moreau, que se confiesa admirador de Chaplin y Keaton, busca la complicidad entre el actor y su títere, intentando desdibujar el rol de manipulador y manipulado. La relación íntima y ambigua con el títere y la investigación sobre el cambio de códigos conforman la esencia de su trabajo.
Con su cabeza calva y sus enormes gafas, Pierre Decuypere encarna brillantemente a un papá-payaso, o a un papá-gallina, basándose únicamente en los gestos, la expresión corporal y la relación con su marioneta. Un dúo peculiar, tierno, divertido y loco entre titiritero y títere. ¡Por qué no! invita a reflexionar sobre las innumerables ideas preconcebidas que podemos tener sobre el reparto de roles entre padre y madre, entre niño y niña, a la vez que cuestiona los prejuicios en torno al género. Un teatro sin palabras, pero no sin voz. La compañía pide expresamente que no se desvele más.
Mis personajes hablan, aunque no se les pueda oír.
Agradecemos que el público que venga a vernos no sepa mucho más que el título, y que el programa no desvele las sorpresas que nuestra obra tiene reservadas para él.
TOF Théâtre es una compañía belga fundada en Bruselas en 1987 bajo la dirección de Alain Moreau. Desde su fundación, y tras el éxito de su primera obra Le tour du bloc, la compañía explora diversas formas de expresión artística (teatro, música, artes de feria), siempre en torno a la manipulación de marionetas (que pueden medir desde cinco centímetros hasta cinco metros), con una técnica que permite al público ver a los manipuladores. Tan heterogéneo como inclasificable, TOF Théâtre crea obras para escenario y para calle, para espacios de todo tipo y para todos los públicos.
En 2002 la compañía se instala en el MONTY, un antiguo cine en ruinas en Genappe (cerca de Bruselas), donde han creado un centro artístico, cultural y cívico. Organizan cada año el festival internacional Maboule, que ya va por su décima edición. En sus 38 años de vida, han creado 23 espectáculos y visitado con ellos 35 países. La última vez que estuvieron en Teatralia fue en 2016 con la obra Piccolo Sentimenti, una coproducción realizada con Teatre delle Briciole (Italia).