Una costilla sobre la mesa: Padre
Presentación de Sacher-Masoch. Lo frío y lo cruel (o el problema de la semejanza)

ESPECTÁCULO CANCELADO

Angélica Liddell / Atra Bilis

  • Teatro
  • Estreno en España
  • País: España (Comunidad de Madrid)
  • Idioma: español y francés
  • Duración aprox: 2 horas (sin intermedios)
  • Año de producción: 2020

  • Una coproducción de La Colline - théâtre national y los Teatros del Canal, con la colaboración del Festival de Otoño de la Comunidad de Madrid.
Texto, dirección, escenografía, vestuario: Angélica Liddell
Con: Oliver Laxe, Angélica Liddell y Camilo Silva
Con la colaboración de: Elzbieta Koslacz, Beatriz Álvarez, Laura Jabois, Raquel Fernández, Blanca Martínez, Olga Redondo y Amor Prior

En la hora de nuestra muerte todos somos hijos”.
Angélica Liddell

Tomando como punto de partida el tratado de Deleuze Presentación de Sacher-Masoch. Lo frío y lo cruel, la hija se enfrenta a la muerte del padre y al problema de la semejanza. Gracias a este acto masoquista con el padre biológico en la antesala de la muerte, la hija se convierte en una madre cristológica (María), tal y como desarrolla Deleuze, y adopta el papel de un verdugo paradójico, puesto que el castigo produce el beneficio del conocimiento y la belleza en un itinerario cruel, que va desde el cuerpo masacrado por la vejez hasta una mística negra, es decir, hasta la contemplación de un Dios tal vez inexistente, pero, al fin y al cabo, fantasma obsesionante. Y, para ello, la hija deviene cazadora de osos, de lobos y de corderos; la hija-madre-verdugo satisface la visión masoquista del mundo y firma el contrato con el padre, que no es nada más que una metáfora de la culpa original que culmina en la estética.

El recorrido empieza por el cuerpo, sigue con las ideas, alcanza lo sublime en el arte y, finalmente, culmina en Dios, es decir, se trata de un camino hacia el misterio. La búsqueda del ideal y de lo bello traza un camino marcado por una crueldad representada que permite pensar lo irrepresentable. El masoquismo es, por tanto, un acto puramente espiritual, que procede del dilema entre la materia y el alma, entre la caducidad del cuerpo vivo (lo bello natural) y la eternidad de lo bello (lo bello artístico, como afirma Hegel); es una búsqueda trascendente a través de la sexualización ritual de la muerte, un deseo de expiación y castigo que abjura de la semejanza al padre (el creador) para, precisamente, reafirmarla. Y reafirmar, también, la infinita soledad frente a lo indemostrable, lo inalcanzable y lo incomprensible, concentrándose en el silencio de Dios, en la semejanza entre el objeto y su representación estética, en la semejanza entre el padre y el hijo.

En la hora de nuestra muerte todos somos hijos. Esta obra es un intento vano de hacer visible lo invisible, lo ininteligible. Un orden lunático bajo el cual corre el río de la angustia y la necesidad de ser amados. La verdadera libertad emana del hecho de aceptar la esclavitud. El masoquista, a su modo, al invertir la relación dolor-placer, destituye la ley de los hombres para instaurar la mítica; quebranta el contrato masoquista establecido por Dios firmando un contrato en la tierra. Así propone Hegel: “la realización de la razón es trágica, tal y como nos enseña el sacrificio de Cristo”.

El estreno absoluto de Una costilla sobre la mesa: Padre tuvo lugar el 10 de enero de 2020 en La Colline de París.



Con nombre propio


Vengo de quemar a mis padres, con tres meses de diferencia entre un cuerpo y otro cuerpo. Ya nunca más podré volver de otro sitio. No quiero recordarlos vivos. Quiero que me acompañen sus cuerpos sin vida, sus rostros marmorizados como máscaras del “Sinsentido” y de la “Sinrazón”, su descanso al fin, ese misterio glaciar, y el dolor inmenso que sentí al tocar la carne ya fría. Quiero guardar la imagen de sus cadáveres como un medallón de oro en mi memoria para que me haga llorar siempre, y así tener siempre dentro de mi la imagen que falta, lo irrepresentable de la imagen que siempre nos faltará. Cada día me esfuerzo por olvidar sus vidas, que son la mía, no quiero tener otro recuerdo que sus muertes, sus muertes, que me devolvieron el gigante del perdón y la piedad. A mi derecha mi padre muerto, a mi izquierda mi madre muerta. El amor en lo alto, esférico y dorado. Te amo, padre. Madre, te amo”.


Angélica Liddell



“Señores:

Estas lecciones se ocupan de la estética; su objeto es el vasto reino de lo bello, y más precisamente su campo es el arte, es decir, el arte bello. (...) Ahora bien, con esta expresión excluímos lo bello natural. (...) En la vida corriente se suele ciertamente hablar de un bello color, de un cielo bello, de un bello río, y asimismo de bellas flores, de animales bellos y aun de seres humanos bellos, pero, aunque no queremos entrar en la controversia sobre hasta qué punto se justifica la atribución de la cualidad de la belleza a tales objetos y hasta qué punto deben en general ubicarse en un mismo plano de lo bello natural y lo bello artístico, puede sin embargo afirmarse ya de entrada que lo bello artístico es superior a la naturaleza. Pues la belleza artística es la belleza generada y regenerada por el espíritu, y la superioridad de lo bello artístico sobre la belleza de la naturaleza guarda proporción con la superioridad del espíritu y sus producciones sobre la naturaleza y sus fenómenos”.


Lecciones sobre la estética, G.W.F. Hegel



“Gracias al contrato, es decir, gracias al más racional de los actos, el masoquista alcanza las regiones más míticas y eternas, aquellas donde reinan las tres imágenes de la madre. En virtud del contrato el masoquista se hace pegar, pero lo que hace pegar, humillar y ridiculizar en él, es la imagen del padre, la semejanza del padre, la posibilidad de retorno ofensivo del padre. El pegado no es “un hijo”, es un padre. El masoquista se hace libre para un nuevo nacimiento en el que el padre no tiene ninguna intervención”.


Presentación de Sacher-Masoch. Lo frío y lo cruel, Gilles Deleuze



“Todo lo que puede verse no existe. La apariencia destruye el mundo. Ningún embrión es verdadero. Cualquier forma es una vida ya vivida. La auténtica semejanza es la semejanza a lo inexistente”.


Una costilla sobre la mesa, Angélica Liddell



Sobre la artista


Nacida en Figueres (Girona, 1966), Angélica Liddell es licenciada en Psicología y Arte Dramático. Consolidada dramaturga y actriz, sus producciones quedan lejos de cualquier tipo de teatro convencional. Sus obras están repletas de un expresionismo desgarrador y una pureza excepcional acompañada de la búsqueda del significado a través del dolor y la transgresión trágica.

En 1993 crea la compañía Atra Bilis Teatro, con la que ha conseguido que sus obras se traduzcan al francés, al inglés, al rumano, al ruso, al alemán, al polaco y al portugués. Sus piezas La casa de la fuerza, Maldito sea el hombre que confía en el hombre: un projet d’alphabétisation, Ping Pang Qiu y Todo el cielo sobre la tierra (el síndrome de Wendy) se han podido ver en el Festival de Otoño y se han presentado también, entre otros, en el Festival de Aviñón, en el Wiener Festwochen y en el Teatro del Odeón de París.

Entre sus premios y distinciones destacan:

• Premio de Dramaturgia Inovadora Casa de América 2003 por Pasión anotada, de Nubila Wahlheim.
• Premio SGAE de Teatro 2004 por Mi relación con la comida.
• Premio Ojo Crítico Segundo Milenio 2005 por su trayectoria.
• Premio Notodo del Público al Mejor espectáculo de 2007 por Perro muerto en la tintorería: los fuertes.
• Accésit del Premio Lope de Vega 2007 por Belgrado.
• Premio Valle-Inclán 2008 por El año de Ricardo.
• Premio Sebastià Gasch d’Arts Parateatrals 2011.
• Premio Nacional de Literatura Dramática 2012 por La casa de la fuerza.
• En 2013 es galardonada con el León de Plata a la Bienal de Venecia de Teatro como reconocimiento a toda su obra.
• En 2016 recibe el Premio Leteo “por su fuerza, su contundencia y su lucha por romper los patrones establecidos del pensamiento artístico”.
• En 2017 es nombrada Chevalier de las Artes y las Letras de Francia, una de las máximas distinciones del país galo.

Información práctica


Información completa del espectáculo Venta de entradas

La crítica ha dicho...